El primer ministro francés, Manuel Valls, llamó a “la vigilancia y la unidad” después de los ataques de los tres últimos días en Francia.

Valls negó que el gobierno restara importancia a los incidentes -un apuñalamiento de policías y el atropello intencional de peatones con dos autos- ocurridos el sábado, domingo y lunes.

“No minizamos”, dijo el primer ministro francés en declaraciones a la radio Europe 1, refiriéndose a los ataques ocurridos en Joué-les-Tours (centro-oeste), Dijon (centro-este) y Nantes (oeste).

Valls, que pidió a los franceses que “mantengan la sangre fría”, reunió el lunes a varios ministros para analizar la situación, pero dijo que no existía “ningún vínculo” entre los tres ataques.

Las fuerzas de seguridad se encuentran frente a individuos “que pueden actuar solos”, lo que complica el trabajo de los servicios de inteligencia.

Recordemos que un hombre al volante de una camioneta hirió el lunes a 10 personas en un mercado navideño del centro de Nantes. El domingo por la noche, otro hombre de 40 años con trastornos psiquiátricos atropelló a trece personas en Dijon.

Y el sábado, en Joué-les-Tours, un joven de 20 años hirió a puñaladas a tres policías a los que había atacado gritando “Alá es el más grande”. El atacante fue abatido por policías.