El presidente estadounidense, Barack Obama, se comunicó este sábado con su par francés, François Hollande, antes de anunciar su decisión de pedir la autorización del Congreso para atacar Siria, dijo una fuente de la Casa Blanca.
Obama dijo que había tomado la decisión de lanzar un ataque en Siria, pero que para ello requería la autorización del Congreso, alejando la perspectiva de una operación militar inminente, a la que Hollande había dado su apoyo.
Luego de que los parlamentarios británicos rechazaran el jueves los planes del gobierno de participar en una acción militar con Washington, Francia es la única potencia que intervendría en eventuales ataques.
Asesores de Hollande en París también confirmaron la llamada de Obama, agregando que ambos líderes destacaron que continúan “decididos a actuar” pese al anuncio de Obama de que consultará al Congreso.
En la visión del mandatario estadounidense, una respuesta militar “limitada” y sin tropas terrestres es la respuesta adecuada para un ataque que, de acuerdo con una estimación de su gobierno, dejó más de 1.400 muertos, incluyendo 426 niños, y es responsabilidad del gobierno sirio, aunque éste la niega.
