Estados Unidos dijo este martes que “no debería haber dudas” de que el gobierno sirio lanzó el ataque químico denunciado la semana pasada en las afueras de Damasco y aseguró que en los próximos días difundirá un informe de inteligencia.

El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, aseguró que “no debería haber dudas, para nadie que aborde lógicamente este tema, de que el régimen sirio es responsable del uso de armas químicas el 21 de agosto en las afueras de Damasco”.

Es “irrefutable” y creer lo contrario es “absurdo”, declaró Carney en una rueda de prensa. El lunes, el secretario de Estado, John Kerry, ya afirmó que era “innegable” que se había perpetrado un ataque químico en Siria, aunque no precisó quién usó los gases tóxicos.

El régimen y la oposición se acusan mutuamente de haber utilizado armas químicas.

Carney avanzó por otra parte que el gobierno estadounidense difundirá “esta semana” un documento de los servicios de inteligencia que demostrará que el régimen de Bashar al Asad utilizó armas químicas.

El portavoz de la Casa Blanca también explicó que el presidente Barack Obama sigue analizando qué respuesta adoptar contra Damasco.

“Las posibilidades que estamos examinando no son para derrocar al régimen” sirio, puntualizó Carney, cuando crecen los rumores de que la respuesta de Estados Unidos y sus aliados será un bombardeo contra zonas concretas controladas por el gobierno de Asad.

La oposición siria afirma que 1.300 personas fallecieron en el ataque químico del 21 de agosto.

Médicos Sin Fronteras (MSF) informó que cerca de “3.600 pacientes con síntomas neurotóxicos” llegaron el 21 de agosto a tres hospitales de la provincia de Damasco, de los cuales 355 perecieron, si bien no pudo “confirmar científicamente la causa de estos síntomas ni establecer la responsabilidad de este ataque”.

Un equipo de inspectores de la ONU inició el lunes la investigación para determinar si fueron usadas armas químicas el 21 de agosto, pero debieron posponer la misión prevista para el martes por motivos de seguridad.