Un tsunami salvó a la aldea griega de Potidea de los invasores persas en el invierno del año 479 antes de Cristo, indicó un estudio divulgado en Estados Unidos, que advirtió que la zona sigue siendo propensa a los terremotos.

Nueva evidencia geológica sugiere que la región aún podría enfrentar tsunamis como el que mató a cientos de invasores persas durante el sitio a la antigua aldea griega de Potidea siglos atrás, indicó Klaus Reicherter de la Universidad de Aquisgrán de Alemania, principal autor del estudio.

Los sedimentos de la norteña península griega donde se encuentra Potidea, y su contraparte moderna Nea Potidea, revelaron signos de masivos eventos marinos, como olas de gran tamaño, señaló el estudio.

A su vez, excavaciones en los suburbios de la cercana ciudad antigua de Mende, en el sur de Francia, también revelaron la ocurrencia de un fenómeno natural de gran potencia en el siglo V antes de Cristo.

Las capas sedimentarias de Mende contienen caracolas antiguas que probablemente provienen del fondo marino y fueron arrastradas por el tsunami, dijeron los investigadores.

El evento fue descrito previamente por el historiador griego Herodoto, testigo de la catástrofe.

Reicherter dijo que los hallazgos del estudio sugieren que el Golfo de Salónica, donde se encuentra la península griega -un área densamente poblada que también es un destino turístico-, debe incluirse entre las zonas de Grecia propensas a los tsunamis.

La investigación fue presentada el jueves en la Reunión Anual de la Sociedad Sismológica de Estados Unidos (SSA, por su sigla en inglés), en San Diego, California (oeste).