El presidente sirio, Bashar al Asad, promulgó el domingo una nueva ley de prensa, en el marco de las reformas anunciadas para contrarrestar la protesta contra su régimen, informó la agencia oficial Sana.

Esta nueva ley liberaliza parcialmente una legislación muy represiva, que condenaba a penas de cárcel a los periodistas que atacaran “el prestigio y la dignidad del Estado, unidad nacional y el moral del ejército, la economía y la divisa nacional”.

“Se trata de una ley más moderna que da la posibilidad a los medios y a los periodistas sirios de desempeñar un papel más global para presentar la verdad”, afirmó a la AFP Elias Mrad, presidente de la Unión de los periodistas sirios, que precisó que un artículo de la nueva ley prohibía las penas de cárcel para los periodistas.

Pese a todo, la ley se mantiene restrictiva y dice autorizar “una libertad de expresión responsable”.

Los periodistas podrán ser condenados a multas que van hasta los 21.000 dólares por difamación.