El mánager francés del Arsenal, Arsène Wenger, afirmó este lunes en rueda de prensa que el pase de centrocampista español Cesc Fábregas al Barcelona suponía para su club la pérdida de un “jugador de clase mundial”.
“Sí, perdimos a un jugador de clase mundial, y estamos tristes por ello. Tratamos de mantenerlo pero al final también tuvimos que respetar el deseo del jugador”, afirmó el entrenador del Arsenal, quien instó en último término a los directivos de su club a aceptar la oferta del Barça por su capitán.
Para Wenger, el internacional español, que fue presentado con el Barcelona este lunes, después de firmar su nuevo contrato con el club catalán, se marchó de los ‘Gunners’, donde ejerció de capitán, porque deseaba volver a su ciudad de origen.
“Hay que entender una cosa, Cesc no se marchó por razones financieras, quería irse a su ciudad”, comentó Wenger, quien apuntó que él necesitaba a un jugador de las características del español completamente comprometido para seguir con los ‘Gunners’.
“Es muy difícil obtener lo mejor de cada jugador, y éste tiene que estar completamente comprometido con donde está”, dijo, aludiendo al caso del español.
Cesc Fábregas, de 24 años, llegó al Arsenal con 16 años, después de haber sido formado en la cantera del Barcelona, a cuyo primer equipo regresó para la temporada 2011-2012 tras una operación hecha oficial este lunes y que se anunció el domingo.
Según las estimaciones, el club catalán se habría hecho con los servicios del jugador después de un traspaso valorado en 39 millones de euros entre fijos y variables.
Tras el pase del español, que generó tensión entre Arsenal y Barcelona por la declaraciones hechas por parte de ambos clubes, Wenger evitó pronunciarse sobre la actitud del vigente campeón de la Liga española y de la Liga de Campeones de Europa frente al fichaje del centrocampista.
“No quiero comentar eso. Sería una conversación sin fin. Lo que siento que es importante es centrarnos en nuestros objetivos y desearle suerte a Cesc, que es uno de los mejores jugadores del mundo. La vida sigue”, aseveró el preparador francés.
