Profundas diferencias se han generado en el cónclave de la Unión Demócrata Independiente en la Región del Bío-Bío para decidir al reemplazante del diputado Juan Lobos en la Cámara Baja; reunión que provocó una dura polémica entre la dirigencia regional y la nacional del partido aliancista.

Alcaldes, concejales y dirigentes del distrito 47 se dieron cita en un hotel de Los Ángeles, donde en completo hermetismo reflexionaron en una primera instancia sobre la figura del fallecido parlamentario.

Posterior a ello comenzó el debate que dejó como resultado al menos tres nombres representativos de la UDI en la Provincia de Bío-Bío, reconocidos por su trayectoria política.

El primero de ellos, es el alcalde de Los Ángeles Joel Rosales, quien era cercano al malogrado congresista pero que de antemano descartó tal posibilidad.

Otro de los nombres que estaría en disputa es el del concejal Eduardo Borgoño, que de no generar consenso podría suceder al jefe comunal angelino si finalmente genera los apoyos en el gremialismo para ocupar un escaño en la Cámara Baja.

La última carta que se estaría barajando es Renato Paredes, intendente suplente de Bío-Bío y quien generaría mayor simpatía al interior del conglomerado.

En esa línea el diputado Ivan Moreira descartó de plano que existan conversaciones en la zona para determinar al sucesor de Lobos, ya que detalló, es un tema sensible para la UDI.

Por su parte el presidente regional de la UDI en Bío-Bío, el diputado Jorge Ulloa, precisó que la directiva nacional no tiene mayor injerencia en las decisiones que se tomen en el distrito 47, más allá de aceptar la propuesta que entreguen.

Finalmente, Ulloa no descartó que este domingo continúen las reuniones en Los Ángeles y Bío-Bío para determinar a corto plazo quién será el sucesor del fallecido diputado Juan Lobos.