Al menos siete personas murieron en dos atentados con bombas casi simultáneos este jueves en la entrada de un mausoleo en Karachi, en el sur de Pakistán, anunció un ministro.

“Al menos siete personas murieron, incluida una mujer”, declaró a los periodistas que se encontraban en el lugar del drama Zulfikar Mirza, ministro del Interior de la provincia de Sind, de la que Karachi es la capital.

“Dos bombas explotaron en la entrada del mausoleo de Abdulá Shah Ghazi”, un lugar con mucha afluencia de un barrio elegante junto al mar, precisó por teléfono a la AFP Azhar Ali, un representante de la policía en Karachi, capital económica de Pakistán y primera ciudad del país con más de 15 millones de habitantes.

No fue posible en un primer momento decir si se trataba de atentados suicida o de bombas disimuladas en la entrada del mausoleo.

Más de 3.700 personas murieron en todo el país en algo más de tres años en más de 400 atentados -la mayoría suicida- perpetrados esencialmente por los talibanes paquistaníes aliados a Al Qaida y que han decretado la yihad contra Islamabad por su apoyo a la “guerra contra el terrorismo” de Washington.

Sus bastiones, en zonas tribales del noroeste, fronterizas con Pakistán y también principal santuario de Al Qaida en el mundo, está sometido desde hace un mes a disparos casi diarios de misiles por parte de aviones teleguiados de la CIA estadounidense.

Washington y la Unión Europea estiman que estos escondites están en el corazón de un complot terrorista que toma como objetivo a ciertos países de Europa, incluida a Gran Bretaña, Francia y Alemania.