El nuevo coronavirus nacido en Wuhan, China, (Covid-19) ha encendido las alarmas sanitarias en decenas de países y ya supera las tres mil muertes en todo el mundo.

El gigante asiático concentra la mayoría de las víctimas fatales y del total de los casos confirmados, por lo que su efecto en esta nación ha sido más fuerte que en el resto del planeta, en todo sentido.

La cuarentena de ciudades, el alargue del año nuevo local, el cierre de empresas e industrias y la menor demanda por electricidad o combustible han tenido una consecuencia inesperada en las emisiones del país más contaminante del mundo.

El cambio fue notoriamente advertido hace algunos días luego que la NASA liberara imágenes captadas por satélites que operan junto a la Agencia Europea Espacial (ESA), registros que comparan la situación que se ha vivido entre enero y febrero de 2020 y el mismo periodo de 2019.

En concreto, los mapas muestran tres tipos de valores: uno entre el 1 al 20 de enero (antes del año nuevo lunar), otro entre el 28 de enero y el 9 de febrero (cerca de las festividades) y el último desde el 10 al 25 de febrero (tras el fin del evento).

NASA
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Las diferencias pueden ser apreciadas a simple vista y son reconocidas desde la misma entidad norteamericana.

“De acuerdo a científicos de la NASA, la reducción en contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2) primero fue aparente cerca de Wuhan, pero eventualmente se expandió por todo el país. Millones de personas han sido puestas en cuarentena en una de las acciones más grandes en la historia de la humanidad”, indicaron.

“Esta es la primera vez que he visto una baja tan dramática en un área tan amplia por un evento en específico”, señaló Fei Liu, un investigador en calidad del aire en el centro de vuelo espacial Goddard de la NASA.

“Este año, la reducción es más significativa que en años anteriores y ha durado más. No me sorprende porque muchas ciudades han tomando medidas para minimizar la propagación del virus”, añadió el especialista.

NASA
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China paralizada

Según un análisis de la ONG Carbon Brief, el Covid-19 ha reducido las emisiones chinas en un 25%, lo que corresponde al 6% de la cifra mundial.

Eso se traduce en 100 millones de toneladas métricas menos si se compara con los resultados de 2019, cuando el país aportó 400 millones de toneladas métricas a la contaminación del planeta.

De acuerdo al medio estadounidense Bloomberg, esa cifra corresponde a todo lo que contamina Chile en un año.

Lo anterior se explica teniendo en cuenta que el uso de carbón en las estaciones eléctricas se encuentra en su punto más bajo en cuatro años y porque las operaciones de las refinerías de petróleo están en su peor nivel desde 2015, mismo panorama que atraviesa la producción de acero, sumado al 70% menos de vuelos domésticos en febrero en comparación con enero.

El gráfico siguiente muestra el consumo de carbón en las seis plantas de poder más grandes de China, comparando información entre 2014 y 2020.

Carbon Brief
Carbon Brief

No obstante, el reporte fue enfático en aclarar que el año nuevo lunar siempre gatilla reducciones en la cantidad de contaminación generada.

Pese a que desde la ONG admitieron que las circunstancias son excepcionales, de resumir un cierto grado de normalidad, China podría retomar su pulso productivo con más fuerza de la común.

De esta manera, de ponerse de pie, el gigante asiático podría recuperar rápidamente su volumen de producción junto con el de las emisiones, si es que la demanda existe.

Por el contrario, de no ocurrir aquello, cualquier impacto de largo plazo en el uso de combustibles fósiles deberá venir de una demanda reducida, generada por problemas económicos como no pago de sueldos o baja en la venta de automóviles.

“Si la demanda de los consumidores se reduce por ejemplo debido a sueldos no pagados durante la crisis, afectando al resto de la economía, entonces la producción industrial y de combustible podría no recuperarse, aunque la capacidad esté disponible para hacerlo”, señalaron en el documento.

Pese a que la administración de Xi Jinping urge volver a la normalidad, ya que asevera que el impacto del Covid-19 ha ido muy lejos fuera de la provincia de Hubei, los gobierno regionales han mantenido los controles y las medidas con la cuales el comercio tiene abajo sus cortinas.

“Este sugiere que están más preocupados de ser culpados de un nuevo brote que mantener la economía paralizada por días o semanas”, concluyó el reporte.