Autoridades de Talcahuano discreparon frente a la decisión del Gobierno de impulsar el megapuerto de San Antonio, aunque con un apoyo mayoritario al proyecto, incluso estimando incluso que podría reforzar la demanda del tercer dique para Asmar. Sobre el efecto para los puertos locales, el intendente descartó que pudiera ser negativo.
Con distintas visiones fue recibida a nivel local la noticia entregada por la presidenta Michelle Bachelet de invertir 3.600 millones de dólares en San Antonio para la construcción de un megapuerto, proyecto que se comenzaría a concretar a partir del año 2026.
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De las autoridades consultadas hubo un respaldo a la iniciativa, expresando por ejemplo el exalcalde de Talcahuano y diputado electo, Gastón Saavedra, que el acceso y la llegada de barcos de gran calado al megapuerto en la Quinta Región haría aún más necesario un tercer dique para Asmar.
Quien tuvo una visión contrapuesta fue el actual jefe comunal del puerto, Henry Campos, expresando que el megaproyecto para San Antonio podría ser un revés para los anhelos de los Astilleros de la Armada.
Consultado sobre el impacto de un megapuerto para los terminales privados de la zona, en Coronel, San Vicente o Penco, el intendente Rodrigo Díaz, dijo que la estrategia es independiente y fue planificada con una mirada a 30 o 50 años.
Durante su campaña presidencial Sebastián Piñera comprometió su respaldo a impulsar un tercer dique, que para su desarrollo y concreción requiere una inyección de 150 millones de dólares.
