Estados Unidos no dejará impune el ataque con misil a un barco de guerra estadounidense en el Mar Rojo, en la costa de Yemen, dijo este martes el portavoz del Pentágono, el capitán Jeff Davis.

El ataque se produjo el domingo de noche y Estados Unidos no se lo atribuyó a nadie, aunque indicó que provino de territorios controlados por los rebeldes hutíes, apoyados por Irán.

Los dos misiles lanzados se dañaron en el mar antes de alcanzar a su objetivo.

“Aclararemos este asunto” y realizaremos “las acciones apropiadas”, dijo Davis. Y agregó que el Pentágono estaba estudiando medidas de “respuesta”.

La guerra en Yemen enfrenta a una coalición, liderada por Arabia Saudita y que está involucrada en el conflicto desde marzo de 2015 que apoya al presidente Abd Rabbo Mansur Hadi, y a rebeldes chiitas hutíes, aliados al exmandatario de Yemen Ali Abdalá Saleh, apoyados por Irán.

Estados Unidos apoya a la coalición liderada por Arabia Saudita.