El precio del cobre volvió a anotar una nueva baja en la Bolsa de Metales de Londres, cayendo bajo la barrera de los US$3 la libra.

El valor del metal rojo se situó en US$2,994, consolidando una baja en 0,6%.

Pablo Ormazabal, gerente de la consultora Visión, explicó que la caída acumulada es importante, pero aún así, el precio del cobre ha mostrado “una mayor fortaleza a otras materias primas como el hierro”.

Todo ello, en medio de los temores existentes respecto a una eventual guerra comercial entre Estados Unidos y China, tras la implantación de aranceles que han sido catalogados como proteccionistas, por parte del gobernante norteamericano, Donald Trump.

“Es justamente ésto lo que significaría la mayor amenaza para el precio del cobre, ya que un menor nivel de comercio, significa una menor actividad global y por ende una menor demanda de cobre”, precisó Ormazabal.

A esto también se sumaría un menor dinamismo en la economía del gigante asiático, además de un “alza sorpresiva en la inflación, que repercuta en las tasas de interés y le signifiquen un viento en contra al crecimiento económico global”, enfatizó el especialista.

Sin embargo, cabe la pregunta: ¿Afectará esta situación a las positivas perspectivas económicas que existen para 2018?

Pablo Ormazabal explicó que todo dependerá si se desata la guerra comercial entre Estados Unidos y China. “La lógica indica que sí se vería afectada la reactivación en la economía, considerando la gran apertura comercial de nuestro país”.

El crecimiento de la economía chilena, advirtió el ejecutivo, podría estar en la
“parte baja de las proyecciones”, situándose cerca del 2%.

No obstante, Ormazabal se apuró en aclarar que “no creemos que éste sea el escenario base para este año. Creemos que los ruidos que han provocado un alza en la volatilidad en casi todos los mercados globales podrían disiparse si es que Trump logra negociar con sus contra partes lo que busca”.

Así también, el economista anticipó que es posible avisorar una remontada en el precio del cobre, en el corto plazo, pero nuevamente sujeta a las negociaciones que realice Donald Trump, y la consecución de los objetivos que se planteó como cambios en el Nafta, y mejoras en los términos de intercambios entre EEUU y China.

“De esta manera, los buenos fundamentos actuales (crecimiento sincronizado en el mundo, mayor demanda de mercados emergentes, mayor adopción de tecnologías limpias que son más intensivas en el uso del cobre) llevarían al precio del cobre a niveles similares a los máximos vistos durante este año (USD 3,3 la libra). Aunque con Trump nunca se sabe”, explicó.