Usando la técnica del trapillo -que consiste en hacer hilos aptos para el tejido usando
trozos de tela- las artistas Luna Acosta y Paula Baeza Pailamilla, colombiana y chilena respectivamente, confeccionaron durante un año una enorme bandera para reflexionar
sobre discriminación, xenofobia, racismo, nostalgia, desplazamiento, migración, empatía
y solidaridad entre Chile y Colombia.

Así, hoy viernes 21 de julio a las 17:00 horas se pondrá fin al proyecto a través de la instalación de la gran bandera de 6.5 metros por 4 metros en la explanada del museo, junto a una muestra fotográfica del proceso que recorrió varios espacio públicos nacionales y colombianos, donde cientos de personas ayudaron a tejer con la ropa que fue donada por migrantes colombianos y ciudadanos chilenos.

En esta performance, las artistas utilizan la bandera como signo de patria, de frontera, de
una construcción friccionada y de pertenencia a raíces que no son propias, pero que
están igualmente marcadas en los cuerpos, por ello la “obra” tejida por todos es una gran
bandera que unirá a Colombia y a Chile mediante una franja roja con la que se simboliza la sangre que atraviesa al continente suramericano.

El peso de la nación” habla sobre el peso de la vida y las historias enmarcadas en la piel de colombianos y chilenos que donaron su ropa, de su sudor, de sus esperanzas y trabajos; de mestizajes renovados, de acentos mezclados, de comidas nuevas, de cuerpos desterrados. Habla de fronteras, de exclusión y de nuevas maneras de mezclarse y generar vínculos.

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