Como una vergüenza calificó la Asociación de Víctimas de Violencia Rural (AVVRU) la sentencia dictada por el Tribunal Oral en lo Penal de Angol en contra de Hugo Melinao y Patricio Queipul, culpables de la quema de dos camiones, además del porte de armas y municiones.

Se trata del ataque incendiario ocurrido el 2 de octubre del 2014, a la altura del kilómetro 595 de la ruta 5 Sur, en las cercanías de Pailahueque.

Por esos hechos Hugo Melinao Licán fue condenado a 4 años de libertad vigilada, además de una multa en dinero, pese a que la Fiscalía estaba solicitando más de 15 años de presidio.

Mientras que Juan Patricio Queipul Millanao fue sentenciado a 3 años y 6 meses por incendio y 541 días por porte ilegal de arma de fuego, municiones y receptación, pena que también deberá cumplir bajo libertad con supervisión de Gendarmería.

Alejo Apraiz, presidente de la Asosiación de Víctimas, pidió que estos casos con “connotación indígena” sean juzgados en otras regiones del país, argumentando que se ha constatado que a pesar de que se acrediten los delitos, al parecer no es suficiente para que los jueces apliquen con criterio las leyes.

El dirigente lamentó que no exista justicia ni para las víctimas de violencia rural, ni para las policías y deja en evidencia que dispararle a Carabineros no tiene reproche penal.

El Intendente de La Araucanía dijo que aunque los hechos de violencia son graves, hay que ser respetuosos de las decisiones de los jueces.

El seremi de Gobierno en La Araucanía, Mario González, fue más critico que el Jouannet y dijo que como Gobierno esperaban una condena de cárcel efectiva.

Ambos comuneros fueron absueltos de cargos por amenazas y homicidio frustrado a personal de Carabineros.