El invierno está aquí y el frío no ha dado tregua en Chile. Pero mientras las temperaturas han bajado en el país, los gastos para mantener calefaccionado el hogar han subido.

Por lo mismo, no está demás conocer algunas estrategias para ayudar a mantener el calor dentro de la casa, sin tener que gastar mucho más.

“La vivienda por sí sola no propaga calor, pero los electrodomésticos que tenemos generan un aumento de temperatura que, aunque en época de frío sea escaso, se puede aprovechar”, aseguró al diario español El País Manuel Barrera Viera, presidente del Colegio Profesional de Ambientólogos de Andalucía y experto en energías renovables.

En este sentido la capacidad de aislamiento que tenga el hogar será vital para aprovechar todos los recursos de calor que se tenga.

Aquí algunos consejos:

– Cierre las puertas

Es sin duda el consejo más fácil que se puede aplicar. La idea es que el calor de las habitaciones que estamos ocupando no se escape y este simple acto impedirá también que el frío de otras habitaciones se disperse por la vivienda.

– Cinta adhesiva aislante

En las ferreterías y en algunos supermercados se pueden encontrar algunas cinta adhesiva aislante, las que se usan para cubrir fisuras que puedan existir en puertas o ventanas, por donde el calor puede escapar y el frío puede entrar.

Estas ayudan a evitar las corrientes de aire, y su precio no es demasiado alto.

– Ventila

No es necesario mantener mantener abierta la ventana por una hora, basta con 5 a 10 minutos de ventilación para cambiar el aire del hogar.

Es importante elegir momentos donde el sol se esté comportando bien, como las mañanas, y por supuesto no hacerlo en todas las habitaciones al mismo tiempo.

Elige cortinas y alfombras adecuadas

No sólo ayudan a que el hogar se vea más acogedor, sino que una buena inversión puede colaborar en el ahorro de energía.

Actualmente el mercado ofrece distintos tipos de cortinas como las blackout e incluso algunas térmicas, en caso que ninguna de ellas te convenza, siempre opta por las más gruesas.

En el caso de las alfombras, las de fibras como lana o pelo sintético son ideales para mantener a raya la humedad y evitar el escape del calor.

– Ojo con las ventanas

Puede que muchas personas no le presten mayor atención al tipo de ventana en su hogar, pero son fundamentales a la hora de la calefacción y pueden marcar una diferencia.

Las ventanas en PVC (policloruro de vinilo), no sólo son prácticas y modernas, sino que resisten las condiciones del exterior.

Ofrecen niveles de aislamiento térmico y acústico muy elevados, lo que ayuda a mejorar notablemente la comodidad de la vivienda.

El aislamiento térmico, genera un importante ahorro en las cuentas de la calefacción, ya que nos ayuda a mantener el calor en invierno y el clima más frío en verano, permitiéndonos reducir así el uso de los aparatos de climatización, lo que implica también que contaminamos menos.