Guardar la carne en el congelador es la forma más segura de conservarla, preservando su sabor y nutrientes. Pero ¿qué ocurre cuando quieres cocinarla?
En este caso, debes considerar que descongelar la carne incorrectamente, aumentará el riesgo de contraer enfermedades.
“No se pueden ver las bacterias a simple vista, por lo que el uso de prácticas seguras de manipulación de alimentos reduce las probabilidades de que crezcan estos microorganismos“, explica Karen Blakeslee, asociada de extensión y coordinadora del Centro de Respuesta Rápida de la Universidad Estatal de Kansas, al diario electrónico Huffington Post.
En este contexto, es fundamental planificar con anticipación el descongelado de tus alimentos. El procedimiento debe hacerse lentamente y la temperatura no debe superar los 40 grados Fahrenheit, el punto donde las bacterias comienzan a crecer rápidamente, señala el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
A continuación te mostramos las cuatro formas más seguras de descongelar carne:
1. En el refrigerador
La carne y el pollo nunca debe descongelarse a temperatura ambiente, esto debido a que el exterior se calentará más rápido que el interior, activando el crecimiento de bacterias, explica Kantha Shelke, científica en alimentos. Por este motivo, el refrigerador es el lugar más seguro para realizar este procedimiento.
Coloca la carne en un plato (para atrapar cualquier líquido que gotee) y guárdalo en la parte inferior del refrigerador, explica.
Medio kilo de carne molida puede demorar un día en descongelarse en el refrigerador. “Los cortes más grandes y las piezas con huesos pueden tomar de dos a tres días”, describe Blakeslee.
En el caso del pollo, puede almacenarse hasta cinco días en el refrigerador antes de cocinarlo. “Siempre que no hayan estado expuestas a temperaturas superiores a los 40 grados”, apunta Shelke.
2. Descongelarla en el microondas
La opción de descongelado del microondas es una forma segura y rápida de hacer este procedimiento. “Primero consulta el manual de instrucciones del electrodoméstico”, advierte Shelke.
Retira la carne de cualquier envase antes de descongelarla y colócala sobre un plato que sea apto para microondas. Mientras se descongela, mueva y separe los trozos, explica.
“La descongelación por microondas es muy rápida, pero no tiene el mismo resultado que otras técnicas”, describe. “En ocasiones, algunas partes de la carne se pueden cocinar y secar, mientras que otras todavía se están descongelando“, precisa la experta.
De este modo, si eliges esta opción, debes cocinar inmediatamente el trozo de carne. Hay que considerar que esta descongelación genera calor y humedad, fomentando el crecimiento de bacterias.
3. Sumergirla en agua fría
El agua fría (nunca tibia o caliente) es otra opción para descongelar carnes rápidamente. “Un paquete de medio kilo de carne molida puede tomar una hora, pero uno o dos kilos de filete podrían demorarse de dos a tres horas”, detalla.
Para hacerlo, debes colocar el trozo en una bolsa a prueba de fugas y sumergirla en un recipiente con agua fría, cambiando el líquido cada media hora, explica Blakeslee.
4. Cocinarla congelada
Según Shelke, este es el método más seguro. No obstante, debes considerar que los tiempos de cocción aumentan aproximadamente en un 50%, en comparación a la carne fresca o descongelada.
Cocinar la carne congelada, garantizará que el exterior del trozo se caliente primero y el interior alcance una temperatura adecuada. Asimismo, Shelke recomienda utilizar ollas de cocción lenta solo para carne y pollo descongelado.
No importa la opción que elijas, los expertos advierten que no es seguro congelar nuevamente la carne, ya que perderá su sabor y podría retener bacterias en su interior.
