Se fueron de los escenarios a las trincheras. Su popularidad es gigante, como su determinación en defensa de Ucrania.
Antytila no era un grupo pop-rock desconocido en la convulsionada Ucrania. Llenaban estadios y otras localidades, en las que miles de seguidores cantaban cada estrofa de sus canciones.
Las letras eran de amor o desamor, como lo describe el medio Euronews, que fue en busca de los integrantes de este grupo, no a un escenario, sino, a una trinchera donde ya no suenan más sus instrumentos musicales. Ahora, hacen sonar las armas en defensa de su país.
Los integrantes principales son Taras, Serhii, Dima, Dmytro y Mykhailo. Los dos últimos se encargan de la logística y suministros. No hay tiempo para los temas de amor. Los de la guerra, los tienen ocupados. Los otros 3 están en primera línea de batalla contra Rusia.
Están claros del por qué están en esa situación. De hecho, estaban preparándose desde hace 8 años, cuando los tambores bélicos sonaban entre dos naciones y el resto del mundo no escuchaba o no quería hacerlo.
“Nuestra participación en la guerra entre Rusia y Ucrania comenzó en 2014. En 2014, Rusia se anexionó Crimea y comenzó actividades delictivas en el Donbás. En ese momento terminamos nuestra gira y comenzamos a trabajar como voluntarios”, aseguró Taras Topolia, cantante de Antytila.
Desde ese entonces, no perdieron de vista al que hoy es su consolidado enemigo, ese que el pasado 24 de febrero sorprendió al mundo lanzando una sangrienta incursión por territorio ucraniano. Fue entonces que esta banda de rock tomó chalecos, cascos, municiones y las armas, soltando hasta nuevo aviso (de paz) sus instrumentos musicales.
“Nos unimos a la defensa de Kiev, el Ejército ucraniano antes de la guerra. Somos padres. Yo tengo tres hijos, Taras tiene tres hijos. Dima tiene un hijo. Y los primeros días de la guerra enviamos a nuestra familia fuera de Kiev por seguridad”, cuenta Serhii Vusyk, tecladista de Antytila.
Desde que viven en combate frontal u operativizando las acciones, los integrantes de Antytila se han dado a la tarea de difundir por videos la difícil situación que afecta a su territorio. Su narrativa da fe de los edificios destruidos, de las zonas residenciales que fueron arrasadas por la fuerza del ejercito de Vladimir Putin, costando la vida a los ucranianos o el destierro, a los que consiguieron huir de la muerte.
Antytila: estamos orgullosos de nuestro presidente
La trinchera en el presente de Antytila, se explica, en parte, con su pasado artístico. Pese a que, escena de guerra y escenario musical, presentan una evidente dicotomía.
Esta banda de rock ucraniana guarda una especial relación con el presidente Volodimir Zelenski, incluso antes de su asunción al poder.
Hace algunos años, cuando este era presentador y cómico, lo invitaron a formar parte del videoclip de su canción LEGO, uno de los mayores éxitos de Antytila. En esta producción, el actual mandatario aparece al inicio, en la escena de una boda y luego en una especie de fusión con el vocalista del grupo, como siendo uno más de sus miembros y hasta cantando parte del tema.
Desde ese entonces, hasta la guerra en la que Zelenski está al frente, estos músicos conservan la admiración por el líder de su país.
“No sé qué nos hubiera pasado si otra persona estuviera en su posición ahora. Especialmente de la vieja élite que se acostumbró a una forma específica de gobernar Ucrania. Estamos orgullosos de nuestro presidente. Es una representación de nuestro espíritu nacional y libertad. Y está manifestando nuestra resistencia y es el líder de esa resistencia. Y ni por un segundo, en las últimas semanas, ha dudado de que Ucrania ganaría”, aseguró Taras Topolia.
Parece que el liderazgo del que hablan, les otorga fuerzas para mantenerse activos, luchando con las armas por Ucrania. El guitarrista, Dmytro Zholud, comparte la motivación de Talas al respecto.
“Es imposible que pensemos que perderemos. Estamos listos para lo que sea. Ahora mismo se está formando una nueva Ucrania. Y la estamos construyendo nosotros”, dijo Zholud.
Pelean con recursos del Estado y con los propios, producto de su trabajo musical.
“Organizamos todo lo que necesitan allí. Tenemos una cuenta bancaria donde reunimos dinero y compramos todo lo que se necesita para nuestros soldados, para nuestro Ejército, defensa y Guardia Nacional. Walkie-talkies, cámaras termográficas, chalecos, cascos, un montón de cosas”, confirmó Dmytro Vodovozov, baterista de Antytila.
El llamado de Antytila a Ed Sheeran
En marzo pasado, cuando el mundo musical intentaba unirse en favor de Ucrania, la banda Antytila hizo una especial petición a uno de los músicos más conocidos a nivel mundial.
“Hola, Ed, saludos desde Kiev. Somos músicos ucranianos de la banda Antytila, una de las bandas más populares en Ucrania, con muchos fans en Ucrania y en todo el mundo. En momentos de paz nuestros conciertos llenaban estadios. La guerra ha cambiado nuestras vidas. Y ahora peleamos con nuestras armas contra los invasores rusos”, le escribió la banda al cantante Ed Sheeran a través de Facebook.
La idea era poner en marcha el Concert for Ukraine (Concierto por Ucrania), un evento con la participación de músicos y artistas, en favor de las personas afectadas por la invasión rusa a esa nación.
En efecto, el concierto se realizó el pasado 29 de marzo, con la participación de Sheeran y de otros cantantes como Camila Cabello. De hecho, ambos compartieron escenario, interpretando temas como Perfect y Fix You, de la banda Coldplay.
La producción corrió por cuenta de las cadenas británicas ITV y STV. Los fondos fueron destinados al Comité de Emergencia de Desastres (DEC).
Antytila quería participar de la transmisión en vivo entre Kiev y Birmingham. Pidieron a los organizadores tocar, asegurando: “No tenemos miedo de tocar bajo las bombas”.
Pocos días después de su pedido, la banda publicó otro video en Facebook relatando que los organizadores del Concierto por Ucrania les habían negado la participación en el evento.
“La razón es que el concierto tiene un propósito puramente humanitario, pero estamos usando cascos y sosteniendo los brazos”, aseguraron los músicos, quienes se conformaron con saber que la recaudación en favor de su país fue un éxito.
12 de millones de libras entre la venta de entradas, publicidad y donaciones públicas, fueron el resultado en este episodio artístico altruista.
Antytila, no obstante, sigue sosteniendo las armas en Kiev, hasta que las bombas dejen de sonar y la paz le de paso a los instrumentos musicales.
