Una madre británica acaba de revelar un extraño caso de superfecundación, debido a que concibió una hija estando embarazada de tres meses. El fenómeno es bastante particular y, a la fecha, especialistas indican que sólo hay 10 casos en el mundo.

Rebecca Roberts (39) indicó al medio CNN que durante 2020 estuvo embarazada de su hijo Noah, no obstante, tres semanas después los médicos descubrieron que en su útero estaba creciendo otra persona. Se trataba de su segunda hija, quien nacería como Rosalie.

“Básicamente, me quedé embarazada cuando estaba embarazada”, indicó en uno de los videos que publicó en Instagram.

Luego de aquella ecografía, los médicos explicaron a Rebecca y su esposo, Rhys Weaver, que los dos embriones estaban creciendo con tres semanas de diferencia, pero a un ritmo similar.

“Se dieron cuenta de que el bebé estaba creciendo a un ritmo constante de tres semanas menos que el primero, y fue entonces cuando me dijeron que creían que era un embarazo de superfetación”, indicó la mujer.

“Cuando me hablaron de la superfetación, Rhys y yo nos fuimos para casa y buscamos en internet para encontrar más información sobre ello, y literalmente no había casi nada”, añadió.

De acuerdo por lo señalado en CNN, en la actualidad existe solamente un estudio sobre las superfecundaciones, el cual fue publicado en Francia en 2008. Allí se indica que el fenómeno es “extraordinariamente raro”.

En este sentido la ginecóloga estadounidense Lillian Schapiro indicó que es sabido que las mujeres ovulan una vez por ciclo, liberando uno o más óvulos. Si la fertilización es exitosa estos se implantan en el útero y comienza el embarazo.

“Si una mujer tiene gemelos se liberan dos óvulos al mismo tiempo. Y en el caso inusual de los trillizos, esos óvulos se liberan todos en una sola ovulación. Los gemelos idénticos ocurren cuando un solo óvulo fertilizado se divide”, explicó.

“En el caso de Rebecca, el óvulo fue fertilizado e implantado durante la primera ovulación, y de alguna manera, ella ovuló nuevamente durante ese mismo ciclo. Otro óvulo también fue fertilizado, se convirtió en otro embrión, y ambos embriones se implantaron en el útero en diferentes momentos”, agregó.

Por su parte, Rebecca sostuvo que antes de concebir a su primer hijo ella había tomado una dosis de medicamentos para estimular la ovulación, lo cual habría influido en el resultado.

Hay que señalar que los niños nacieron en el mismo parto, Rosalie de manera prematura, y se encuentran en buena condición general.