El síndrome boca-mano-pie suele manifestarse con sarpullidos y ampollas en lactantes y niños y niñas de hasta 5 años. Conoce todos los síntomas y qué hacer en caso de contagio.

En lo que va de 2024, en la región de Coquimbo se han detectado al menos 5 casos del síndrome boca-mano-pie ¿Quiénes están en riesgo de contraerlo? ¿Cuáles son sus síntomas y riesgos? Encuentra las respuestas en esta nota.

Para empezar a despejar las dudas, este síndrome es una infección que afecta principalmente a lactantes y menores de 5 años, de hecho en ocasiones las primeras detecciones ocurren en jardines o salas cuna.

Esta complicación sanitaria debe su nombre a la notoria ocurrencia de síntomas que suelen presentarse en la boca, manos y pies de los menores. De acuerdo a la Universidad de Chile, el contagio del síndrome suele provocarse por el traspaso del virus coxsackie.

Según la organización Nemours KidsHealth, los virus de coxsackie forman parte de la familia del enterovirus (que también agrupa a la hepatitis A y el virus del polio), el cual vive en el aparato digestivo.

¿Cuáles son los síntomas del síndrome boca-mano-pie?

Como hemos revisado, este síndrome afecta a niños y niñas en su periodo lactante, hasta los 5 años. Uno de los síntomas visibles más comunes es la aparición de sarpullido o ampollas en la boca, como en lengua, encías y cara interna de las mejillas; palmas de las manos y plantas de los pies, y glúteos.

Otra sintomatología asociada es la fiebre, dolor de garganta, náuseas, irritabilidad y pérdida del apetito consigna Mayo Clinic.

Nuestro medio asociado Diario El Día, conversó con la seremi de Salud en la región de Coquimbo, dra. Paola Salas, quien mencionó que esta infección puede transmitirse a través de gotitas de saliva -que contienen partículas del virus- cuando una persona estornuda o tose.

Además indicó que otras formas corresponden a “tocar a una persona infectada o tener otro contacto cercano, como besarse, abrazarse o compartir tazas, vasos o cubiertos”.

“Tocar las heces de una persona infectada, como cuando se cambian pañales, y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca y finalmente, tocar objetos y superficies que tengan el virus, como las manijas de las puertas o los juguetes, y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca”, añadió.

¿Existe un tratamiento para el síndrome?

El síndrome boca-mano-pie no tiene un tratamiento específico, ya que las molestias suelen desaparecer por sí solas al cabo de unos días. Sin embargo, sí se recomienda seguir algunas pautas para aminorar el malestar de las y los menores.

Por ejemplo, mantener la hidratación o dar alimentos en base a papillas. Además se recetan analgésicos como paracetamol o ibuprofeno.