El broncopulmonar de Nueva Clínica Cordillera, Dr. Luis Ignacio Valdivia, explica las principales causas, incidencia en el país, medidas de prevención y tratamientos para cada etapa del cáncer de pulmón.

El tumor maligno más frecuente en la población mundial es el cáncer de pulmón, siendo la principal causa de muerte por cáncer. En Chile, las cifras superan los 2 mil casos nuevos año a año, y es el segundo tipo de cáncer más común, proyectándose que será la primera causa en los próximos años.

El profesional de Nueva Clínica Cordillera, Dr. Luis Ignacio Valdivia, explicó que el “el cáncer de pulmón es una enfermedad principalmente de exposición, relacionada en más de un 90% de los casos a interacción con factores que generan inflamación y daño pulmonar, siendo el principal factor de riesgo el consumo de cigarro”.

En tanto, Dr. Valdivia, agregó que “un porcentaje menor son personas no fumadoras, que pueden tener como factor de riesgo la exposición en sus ambientes de trabajo a partículas como el asbesto -que es un polvo tóxico para el pulmón-, el talco, el carbón u otros polvillos inorgánicos, lo cual genera una inflamación pulmonar crónica similar al efecto producido por el cigarrillo, dañando así el ADN, lo que conlleva a mutaciones y aumenta el riesgo de cáncer”.

Prevención: el principal desafío para Chile

Este 17 de noviembre se celebra el Día del Cáncer de Pulmón, fecha que busca generar conciencia y sensibilizar a la población sobre esta enfermedad. En este contexto, el principal desafío nacional es el llamado a la prevención, siendo el dejar el cigarrillo una de las conductas más complejas de erradicar.

En este sentido, una de las formas de prevenir la enfermedad es “evitar el consumo de cigarrillos u otras sustancias inhaladas. Además de reducir la exposición, tanto a nivel local como empresarial, a los polvos inorgánicos que puedan ingresar en las vías respiratorias”.

Por otro lado, los buenos hábitos físicos y alimenticios son medidas preventivas para no contraer cáncer al pulmón. Con simples actividades, tales como mantener una buena condición física, hacer ejercicio regularmente, mantener una dieta sana y evitar la comida chatarra, pueden ayudarnos a evitar alteraciones celulares que podrían inducir la aparición de neoplasias.

Actualmente, los avances de la tecnología han aumentado los tratamientos para combatir el cáncer de pulmón. El especialista de Nueva Clínica Cordillera explica que “el primer paso es realizar un diagnóstico precoz en pacientes con factores de riesgo. Luego, estadificación rápida del grado de avance de la enfermedad, para poder definir las estrategias terapéuticas más idóneas según cada etapa y condición del paciente”.

“Para ello, existen actualmente tecnologías que permiten realizar un diagnóstico y estadificación muy precisa. Hay múltiples estrategias terapéuticas que habitualmente se emplean de forma asociada dependiendo de la etapa del cáncer, entre ellas la cirugía, quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia. Es importante mencionar que el cáncer debe ser abordado por un equipo multidisciplinario que incluya oncólogo, radiólogo, cirujano torácico, neumólogo, kinesiólogo y paliativista”, añade.

Y enfatiza que “lamentablemente el cáncer de pulmón no presenta síntomas en etapas precoces, por lo tanto, las medidas de prevención, entre ellas evitar el consumo de cigarros o bien el abandono de este, son trascendentales para prevenir la aparición de esta enfermedad. Aproximadamente el 70% de los casos se diagnostican en una avanzada, donde las opciones terapéuticas curativas se reducen ostensiblemente”.

Pese a esto, el especialista indicó que existen formas de detectar tempranamente el cáncer al pulmón, una de ellas son los screening, sistema que consiste en buscar pacientes o población que se considera de riesgo para realizarles un scanner de baja de dosis de radiación, a fin de diagnosticar a pacientes asintomáticos.

Sumado a esto, el Dr. Valdivia recomienda prestar atención a los siguientes síntomas, los cuales pueden ser los primeros indicios de la enfermedad:

– Asistir al especialista de salud si presenta una tos persistente por más de 14 días sin una causa aparente.

– Cualquier tipo de expectoración con sangre.

– Dificultad respiratoria.

– Dolor torácico

– Pérdida de peso.