La actriz y cantante australiana, Olivia Newton-John, falleció este lunes a los 73 años luego de haber sido diagnosticada con cáncer de mama en 2017. Respecto a esta afección, un especialista entregó sus recomendaciones para prevenirla.

Durante este lunes, mediante su cuenta oficial de Instagram, la familia de la cantante y actriz australiana, Olivia Newton-John, informó su muerte a los 73 años a causa del cáncer de mama.

A la mujer se le había detectado en dos ocasiones anteriores la enfermedad, en 1992 y 2013, en ambas oportunidades logró recuperarse. Sin embargo, en 2017 el cáncer regresó hasta arrebatarle la vida.

De acuerdo a datos del Observatorio Global del Cáncer (Globocan), para el 2020 “en Chile se diagnosticaron 55 cánceres de mama por cada 100 mil mujeres”. De esta manera, se convirtió en “el tumor más frecuente en las mujeres chilenas y también es el que produce una mayor cantidad de muertes cada año”, afirmó el Inta.

Cáncer de mama

Según explicó el ginecólogo de Clínica MEDS, Jaime Letzkus, “el cáncer de mama se produce por un crecimiento anormal de la célula de la glándula mamaria, principalmente por un desequilibrio en el control del crecimiento de estas por un factor genético, habitualmente, y por una serie de factores ambientales que lo estimulan”.

Aunque esta enfermedad es la principal causa de muerte por cáncer en mujeres tanto en Chile como en el mundo, el ginecólogo advirtió que no es una enfermedad especialmente mortal y que tiene un pronóstico favorable en la mayoría de los casos cuando se detecta de manera temprana.

“Que sea la causa más frecuente de muerte por cáncer en la mujer es, primero, porque está casi exclusivamente concentrado en este grupo. Menos del 1% de los casos corresponde a hombres”, explicó Letzkus.

El alza en la mortalidad, según el profesional, se debería a que “ha aumentado la frecuencia del diagnóstico”.

Detección temprana

Para detectar de manera temprana la enfermedad es importante, afirma el profesional, practicarse mamografías anuales, especialmente luego de los 40 años.

Esto sumado a la autopalpación, la cual recomienda hacer en la época post menstrual y de manera frecuente.

Durante este autoexamen se debe prestar atención a “cualquier desequilibrio en la forma de la mama, retracciones de la piel, nódulos que se toque durante el reposo de la mama, pérdida de algún líquido en el pezón (sobre todo si este es de aspecto hemático), descamaciones o alteraciones en las estructuras de la mama y si hay edema“.

El rastrear este tipo de cáncer de manera precoz involucra que “el tumor esté solo en la mama, que sea pequeño y que no haya comprometido los ganglios de la axila ni ningún otro órgano”, lo cual, según afirma el especialista, podría elevar la sobrevida a un 90%.

En cuanto al cáncer de mama que sufría Olivia, este se encontraba en etapa cuatro con metástasis.