Comocido como el Día de los Patrimonios Culturales, este 27 y 28 de mayo los chilenos nos reencontraremos con las manifestaciones patrimoniales más importantes de nuestra sociedad. Mientras salimos a las calles en familia a celebrar esta fiesta nacional, la memoria histórica de nuestro país resonará a través del llamado a mantener vivas nuestras tradiciones, patrimonios culturales y naturales, y transmitirlos a las próximas generaciones.

En este contexto, no podemos dejar de recordar la importancia del patrimonio inmaterial, costumbres y expresiones que nos identifican y profundizan nuestras raíces. Y es aquí donde los cementerios se vuelven agentes de gran importancia, porque en ellos recae la responsabilidad de resguardar, difundir y honrar la memoria y el legado de tantos hombres y mujeres que han marcado la historia nacional.

Además, los cementerios cuentan con unas de las mayores manifestaciones patrimoniales culturales, los rituales de despedidas, pues en ellos las familias y las comunidades simbolizamos la forma en que entendemos la vida y la muerte y cómo queremos recordar a los que parten.

Así los cementerios, sean de siglos pasados o contemporáneos, albergan un patrimonio inmaterial sin igual y digno de recordar. Sí, recordar, del latín “recordare”. “Re”: volver a, “cordare”: corazón, que es donde antiguamente se pensaba que reposaba la memoria, pero que significa “volver a pasar por el corazón” a todos aquellos hombres y mujeres que han marcado nuestra historia con sus actos, saberes, valores y ejemplos de vida. Por eso es tan necesario y valioso que los cementerios y parques cementerios promuevan, eduquen y difundan entre la comunidad estos patrimonios inmateriales y que participen activamente del Día de los Patrimonios.

Es por ello que, rescato que por primera vez Parque del Recuerdo se sume a esta fiesta de la cultura, del reconocimiento y de la memoria, con sus grandes extensiones de prados verdes, su paisajismo simbólico, con templos de moderna arquitectura y enormes columnas escultóricas que simulan un reloj solar, símbolo de que el tiempo pasa, pero el cariñoso recuerdo está presente cada hora del día.

También rescato que abran sus puertas e inviten a la ciudadanía a reconectar con la historia y trayectoria de tres grandes del fútbol nacional. El futbolista y comentarista deportivo, Sergio “Sapito” Livingstone; el destacado DT nacional, Fernando Riera, y un emblemático jugador de Universidad Católica, Raimundo “Mumo” Tupper; todos ellos ejemplos de los más altos valores del mundo deportivo, quienes descansan en Parque Américo Vespucio.

Nuestra sección de OPINIÓN es un espacio abierto, por lo que el contenido vertido en esta columna es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial de BioBioChile