Si bien el aumento de la tasa de interés es una forma de combatir la inflación, esto ciertamente afectará tu bolsillo. Si tienes recursos, puede que aumenten, pero si eres de los que debe echar mano a la tarjeta de crédito para salvar el mes…la historia es diferente.

Hemos señalado en columnas anteriores que una de las formas en que el Banco Central combate la inflación es mediante el alza de la tasa de interés. Por otro lado, siempre se ha repetido y se repetirá en las próximas semanas que los impuestos sirven para redistribuir la riqueza, lo cual en parte es cierto, ya que cuando se cobran impuestos se tiende a cobrar más a quienes más tienen.

Sin embargo, se deben tener en consideración diversos factores económicos que podrían aumentar o disminuir la brecha entre ricos y pobres, siendo uno de estos factores la ya mencionada tasa de interés

El aumento de la tasa de interés fijada es la fórmula que tiene el Banco Central para el retiro del estímulo monetario. De tal forma que las personas, al darse cuenta de que tendrán que pagar un mayor interés al contraer una deuda, terminan decidiendo no endeudarse, lo que trae como consecuencia que haya una menor cantidad de dinero circulando.

Ahora pensemos en qué es lo que ocurre en la realidad de nuestro país y que se agudiza más en situaciones de crisis como las actuales. Quienes tienen mayor cantidad de recursos se refugian en diversos instrumentos de inversión en dólares, oro, acciones y depósitos a plazo, los cuales al estar alta la tasa de interés dan una mejor rentabilidad que en tiempos normales.

Por otro lado, la mayoría de las personas que no tienen la posibilidad de utilizar estos instrumentos, ven restringido su acceso al crédito que les podría permitir acceder a la casa propia o realizar algún emprendimiento. Pero la situación es peor para quienes mes a mes utilizan las tarjetas de crédito en nuestro país, para pagar gastos básicos y extraordinarios, ya que sus ingresos mensuales no alcanzan.

A lo anterior sumemos la inflación, de la que se ha hablado de manera más amplia y que termina siendo un impuesto para la gente más pobre, ya que en un año sus sueldos pierden un 7,2% de su valor.

Es así que una nueva alza de interés del Banco Central haría que quienes usan diariamente las tarjetas de crédito tengan que destinar una mayor cantidad de sus ingresos al pago de éstas por un mayor interés y con un sueldo que ya viene disminuido por la inflación. Mientras que, por otro lado, quienes tienen más recursos, ahorran y mantienen o aumentan su riqueza producto de los instrumentos que los protegen en estos tiempos de crisis.

¿Es una solución el aumento de impuestos? En parte, pues pese a una reforma tributaria que grave con más impuestos a quienes tienen más ingresos, los recursos recaudados no llegarán por igual o simplemente no llegarán a quienes tienen menos.

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