Aún no se recuperan los empleos perdidos a consecuencia de la pandemia y ahora estamos ad portas de una posible guerra que ha provocado la incertidumbre en los mercados. Por si fuera poco, la inflación seguirá afectando tu bolsillo.
El país enfrenta múltiples desafíos económicos de cara a este año, dentro de los cuales está el recuperar empleos perdidos producto de la pandemia.
Se estima que a consecuencia de esta se perdieron alrededor de 2.400.000 y aún falta por recuperar 250.000 empleos, pero no se toma en consideración a aquellos que durante el tiempo de pandemia tienen las capacidades para sumarse a la fuerza laboral.
El empleo es uno de los principales focos para esta etapa de recuperación económica.
Un desafío que tiene que estar entre las preocupaciones del futuro Gobierno de Gabriel Boric, quien en las próximas semanas llegará a La Moneda. ¿El motivo? Se viene un difícil escenario no sólo a nivel país, sino que también mundial.
Algunos de los datos que han dado las autoridades provocan una sensación de falso conformismo, pero en el fondo son un efecto rebote de las malas cifras del 2020.
¿Por qué tendríamos que esperar que todo se mantenga si no se ha hecho ningún cambio sustancial al sistema económico? Estamos en una especie de espejismo económico.
Se vienen años complejos. Se anuncia una recesión para 2023 y un alto grado de incertidumbre para 2022, debido a las decisiones políticas que se deben adoptar y la situación internacional: estamos ad portas de una eventual guerra en Ucrania, que ha provocado incertidumbre en los mercados, el alza del dólar y la bencina, lo que afectará a los bolsillos de los chilenos.
Aunque parezca obvio, para que se creen empleos es necesario que exista inversión. Y para que el dinero de la inversión llegue a un país, deben haber incentivos y condiciones favorables, lo que no se ve en la actualidad. Por lo demás, si no están las condiciones para crear empleos, menos lo están para crear empleos de calidad.
La falta de inversión, que por ahora se ve lejana por todos los nubarrones en el horizonte, no sólo hará que se vea afectada la cantidad de empleo, el tipo de estos y su calidad, sino que también provocará que los sueldos se estanquen y con una inflación que se estima que calculada a 12 meses, en mayo llegue a un 9%. Sin duda, esto se sentirá muy fuerte en el bolsillo de las chilenas y chilenos.
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