En el marco de la investigación ambiental que enfrenta el proyecto “Centro Comercial Cencosud Shopping en Vitacura”, tres organismos públicos presentaron observaciones que cuestionan a la falta de especies nativas en el paisajismo y a la relocalización de reptiles hallados en el terreno.
La iniciativa, que contempla una inversión de US$125 millones de Cenco Malls fue presentada como un centro comercial al aire libre, de baja altura y diseñado para integrarse al entorno natural de Vitacura. En ese sentido, busca convertirse en un punto de encuentro y conectar con el entorno natural.
El proyecto contempla tres niveles de locales comerciales, supermercado, tiendas ancla, cine, centro médico y espacios culturales, además de un subterráneo para estacionamientos.
También se incluyen mejoras viales y peatonales, junto con la construcción de más de 1,5 kilómetros de ciclovías. El proyecto se ubicará en Avenida Santa Cruz N.º 5050, en la comuna de Vitacura.
Reparos ambientales
Según informó La Segunda, autoridades realizaron diferentes observaciones sobre la flora, fauna y el manejo de residuos.
En un oficio dirigido al director regional del SEA, Arturo Farías, la Seremi de Medio Ambiente Metropolitana, Sonia Reyes, señaló que el proyecto paisajístico “debe incorporar mayoritariamente especies nativas de hoja perenne, propias del ecosistema mediterráneo”, en línea con lo establecido en el Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica.
Además, Reyes cuestionó el área escogida para la relocalización de reptiles como lagartos del género Liolaemus: “Se requiere aclarar si dicha área es de propiedad del titular, y cómo se asegura que no sea intervenida en el corto, mediano y largo plazo para garantizar la sobrevivencia de las poblaciones relocalizadas”.
Asimismo, el director regional del SAG, CLaudio Ternicier, rechazó la propuesta de traslado de fauna al advertir que especies como Liolaemus tenuis, Liolaemus chiliensis y la culebra de cola larga presentan baja densidad poblacional en la zona, por lo que el sitio receptor debe contar con condiciones ambientales similares al hábitat original.
Por otro lado, el Seremi de Salud Metropolitano, Benjamín Soto, observó otros reparos en el manejo de residuos y aguas grises. En ese sentido, advirtió que no se declararon todas las fuentes de ruido vinculadas a obras de demolición y faenas en altura.
En respuesta a estas observaciones, la empresa actualizó en julio sus compromisos ambientales voluntarios, que incluyen: monitoreo arqueológico permanente, capacitaciones a trabajadores en protección de hallazgos culturales, un plan de comunicación comunitaria en coordinación con el colegio Saint George, programas de contratación local a través de OMIL, manejo de residuos y reciclaje, además del uso de maquinaria de bajas emisiones para disminuir la contaminación del aire.