Bomberos revela que el 40% de los incendios en Valparaíso son por cortocircuitos eléctricos

El Cuerpo de Bomberos de Valparaíso reveló que cerca de la mitad de los incendios estructurales que se han registrado en la comuna, en los últimos dos años, han ocurrido a raíz de cortocircuitos eléctricos.

Desde el municipio porteño argumentaron que las instalaciones antiguas y la topografía de la ciudad pueden responder a dicha cifra.

Fue cerca de la medianoche del reciente sábado 5 de febrero cuando se logró controlar un nuevo incendio estructural en el centro de Valparaíso, el cual consumió un edificio de dos pisos en la avenida Pedro Montt, resultando en consecuencia, 13 locales comerciales afectados y 3 personas damnificadas.

La emergencia habría comenzado por un cortocircuito eléctrico, lo que de acuerdo a cifras recabadas por el Cuerpo de Bomberos de Valparaíso, ha sido una constante en los últimos dos años.

El comandante Rodrigo Romo, puntualizó que cerca del 40% de los siniestros estructurales en la comuna se han originado, precisamente, por una falla eléctrica.

El Cuerpo de Bomberos porteño también precisó que muchos de estos incendios estructurales han derivado en investigaciones del Ministerio Público, donde incluso se han registrado personas fallecidas.

Ezio Passadore, encargado de emergencias de la Municipalidad de Valparaíso, manifestó que la mayoría de las instalaciones eléctricas en la comuna no había previsto el uso que tienen actualmente.

“Muchos de estos circuitos fueron instalados en abastecer muy pocos instrumentos eléctricos, a lo más un televisor, pero hoy en día prácticamente todo lo que es el comportamiento humano se basa en la energía eléctrica”, argumentó.

Passadore agregó que el Cuerpo de Bomberos había advertido -hace más de 100 años- que la tecnología y las nuevas propiedades de la ciudad puerto podían generar riesgos de incendio.

Otro de los siniestros que también han comenzado por un cortocircuito eléctrico en Valparaíso se remonta a mediados de noviembre de 2021, cuando una emergencia consumió tres locales comerciales y las antiguas dependencias del Centro de Formación Técnica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).