Una particular decisión tomaron unos sujetos que protagonizaron el robo de un aserradero portátil el domingo pasado en Lago Ranco. Y es que con el pasar de los días, se contactaron vía WhatsApp con el propietario para concretar la devolución del equipo utilizado para faenas forestales. Incluso, encadenaron la especie a una señalética.

¿En presencia de ladrones arrepentidos? Una curiosa situación es la que se registró en Lago Ranco, región de Los Ríos, donde unos sujetos que robaron un aserradero portátil, decidieron devolverlo días después a su propietario.

Según información de Radio Bío Bío, desde la PDI detallaron que la sustracción se produjo el domingo en un predio del sector Los Mañíos en la mencionada comuna.

En aquella oportunidad, hasta el lugar llegó un grupo indeterminado de personas, que rompió las cadenas que impedían el acceso, concretando el robo del aparato destinado a faenas forestales.

Al percatarse de la situación, el propietario del aserradero portátil denunció el hecho y desde la Fiscalía se instruyeron diligencias a la Policía de Investigaciones (PDI).

¿Ladrones arrepentidos en Lago Ranco?: se contactaron con dueño para devolver aserradero portátil

Todo, dentro del procedimiento habitual. Sin embargo, cuando los detectives tomaron contacto con la víctima del robo, les indicó que había recibido mensajes de los ladrones.

En ese contexto, señaló que los individuos pretendían devolver la máquina. Así lo narró el subprefecto Héctor Hernández, jefe de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de La Unión, quien precisó que los sujetos contactaron al dueño vía WhatsApp.

Y así fue. Al llegar al lugar, los funcionarios policiales encontraron el aserradero portátil abandonado en la vía pública. Eso sí, amarrada con cadenas a una señalética.

¿Preocupados para evitar que otros ladrones con menor grado de arrepentimiento lo sustraigan? Aquello probablemente será aclarado durante la investigación que maneja la PDI.

Hasta el cierre de esta nota, se ha informado de personas detenidas a raíz de este hecho, mientras que la máquina, avaluada en $8.500.000, fue devuelta a su propietario.