La mañana de este martes, el presidente Sebastián Piñera agradeció al gobierno de Brasil por haber colaborado en la extradición de Mauricio Hernández Norambuena, el exfrentista conocido como “comandante Ramiro”, uno de los asesinos del senador Jaime Guzmán y secuestrador de Cristián Edwards, hijo del fallecido dueño de El Mercurio.

“Todos sabemos que se fugó y hasta ayer estaba eludiendo a la justicia chilena. Por eso, el Gobierno hizo gestiones con Brasil para que una persona que está condenada por asesinato y por secuestro cumpla su condena en una cárcel chilena”, dijo el jefe de Estado ante la prensa.

“Yo creo que el hecho que Hernández Norambuena esté preso hoy día en una cárcel chilena fortalece nuestra justicia, combate la impunidad y la delincuencia y también fortalece nuestro Estado de Derecho”, añadió.

Sobre la rebaja de la pena a 30 años, confirmada esta mañana por el Gobierno, Piñera sostuvo que para extradiciones como esta, debido a un convenio suscrito entre Brasil y Chile, la condena a cumplir no puede exceder lo máximo estipulado en la normativa del país de origen, algo que Chile “debe respetar”.

Tras su llegada a Chile cerca de las 04:00 horas a bordo de un avión de la Fuerza Aérea, el exfrentista fue trasladado hasta la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago, el mismo desde donde se fugó el 30 de diciembre de 1996 en un helicóptero junto a sus compañeros Ricardo Palma Salamanca, Pablo Muñoz Hoffmann y Patricio Ortiz Montenegro.