El recién asumido presidente del Senado, Jaime Quintana (PPD), junto al vicepresidente de la Cámara Alta, Alfonso de Urresti (PS), se reunieron este jueves con el presidente Sebastián Piñera para plantear sus reparos ante el proyecto que amplía el control de identidad a menores de 14 años.

Quintana sostuvo que la medida “no es oportuna” en torno a los indicios que entrega el Gobierno en la materia, además de ser “un retroceso”.

“Esa voluntad auténtica y genuina que el Presidente ha manifestado en orden a resolver los temas de infancia, se puede ver alterada con la propuesta de un control preventivo de identidad”, expresó.

La iniciativa será presentada la próxima semana, en el marco del Plan Calle Segura, según informó Piñera durante la jornada.

El senador detalló que analizó estadísticas respecto de “la inconveniencia de plantearse un proyecto tal cual como se ha mencionado” y explicó que “esta iniciativa contraviene abiertamente lo que es la Convención de Derechos del Niño (…) Creo que el Gobierno entra en un terreno peligroso si va a persistir”.

Tarea pendiente

Para De Urresti este proyecto “es un retroceso, es un proyecto que no va al fondo del asunto”. El senador del PS perseveró en la idea de mejorar Carabineros y subrayó que el Ministerio Público también “tiene una tarea pendiente”.

“Creemos que un proyecto de esta naturaleza divide a la oposición, divide al Gobierno y a la sociedad, respecto a una situación que nos convoca: combate a la delincuencia absolutamente, pero el foco está mal planteado“, acotó al respecto.

El parlamentario del PS hizo hincapié en el Servicio Nacional de Menores (Sename) en el ámbito delictivo. “(A un niño) hay que acompañarlo, hay que entender que el entorno no está funcionando”, dijo.

También emplazó a la policía a hacer “un trabajo más efectivo de identificar y establecer focos delictivos y que el Ministerio Público tenga una presión, porque muchas veces estos jóvenes son utilizados por adultos, por personas mayores de edad”.

La mesa del Senado planteó la necesidad de “un diálogo permanente y fluido con el Ejecutivo” e incluso propusieron un debate “a lo Macri” para discutir matrimonio igualitario y las bases de una nueva Constitución.

“Hay que cuidar el tono, y eso el Presidente sabe que es un tema sensible, porque las personas necesitan respeto y las instituciones que están obligadas por ley a relacionarse también necesitan respeto”, concluyó el senador Quintana.