Según un informe elaborado por Carabineros, que contiene las acusaciones originadas por contaminación acústica en las comunas, Antofagasta es la más ruidosa, mientras que deja a Punta Arenas como la más silenciosa.

En los últimos cinco años, la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) recibió un promedio de 1.542 denuncias anuales. De éstas, el 47% tienen que ver con ruido ambiental, señala El Mercurio

Las multas gravísimas pueden llegar a cobrar hasta 10 mil Unidades Tributarias Mensuales (UTM).

No obstante, la SMA proyecta que este año terminará más ruidoso, pues han llegado 1.611 requerimientos a la fecha, superando el promedio del último quinquenio.

Desde ensayos de bandas estudiantiles hasta zumba es lo que molesta a los vecinos del Estadio Regional Calvo y Bascuñán, de Antofagasta, donde el ruido se escucha hasta las 22:00 horas, durante la semana.

La situación es agravada por los bares del sector, hecho que motivó la creación del movimiento “No más ruido”, por parte de los vecinos. “Vivimos en un infierno”, expresó al matutino uno de ellos, asegurando que la hora de dormir se asemeja a poner una cama frente a una fonda.

Entre enero y octubre de este año, Antofagasta registró 123 denuncias por ruidos molestos, según las cifras de Carabineros, que consideraban a comunas con más de 50 mil habitantes.

Le sigue la Viña del Mar, con 107 denuncias, Coquimbo (103) y Las Condes (101), mientras que el sur parece ser más calmado: Punta Arenas no tuvo ninguna, Coyhaique tuvo 32 y Concepción, 43.

Así como Antofagasta, un vecino de Viña del Mar, señaló que está obligado a cerrar las ventanas de su departamento, a causa del ruido de producen los vehículos motorizados que circulan en la calle donde habita.

Mientras tanto, en Coquimbo indicaron que, a ese mismo ruido del tránsito motorizado, se suma el del cableado eléctrico, producido por torres de alta tensión. Éstas -aseguró- producen dolores de cabeza y somnolencia, razón que lo ha llevado junto a sus vecinos, a presentar más de 50 denuncias.

En la otra vereda, una vecina de Punta Arenas indicó que si bien existen fiestas ocasionales que pudieran romper la tranquilidad de la capital magallánica, normalmente, cuando ello ocurre, prácticamente no se denuncia a Carabineros.

Asimismo, un vecino de Coyhaique aseguró al matutino que “hay tranquilidad y casi no se siente el ruido ambiente“.