El contralor general de la República, Jorge Bermúdez, se refirió a la investigación que realizó la institución sobre algunos gastos hechos por la Corporación Nacional Forestal (Conaf) en los incendios ocurridos en el periodo de 2016 y 2017.

Según se indica en el texto, Conaf contaba con dos aeronaves para combatir los incendios que mantenían desperfectos, por lo que no pudieron ser utilizadas. Tras esta situación, el organismo debió realizar contrataciones externas a privados.

Estas contrataciones habrían significado gastos por $1.170 millones.

Sin embargo, este gasto no fue el único problema que detectó la Contraloría. A esto se sumó una escasa fiscalización a los Planes de Manejo para Incendios en los predios de Florida y Santa Olga.

Además, dio a conocer la inexistencia de un inventario actualizado con los bienes que son destinados al combate de los incendios forestales.

A raíz de estas irregularidades detectadas, el contralor Jorge Bermúdez señaló que “hicimos una investigación especial a propósito de las contrataciones de aeronaves efectuadas en los grandes incendios que se produjeron a principio del año pasado”.

“Ahí la observación más grande dice relación con las aeronaves que estaban en mal estado, que no estaban operativas y que obligaron a la institución, Conaf en este caso, a contratar con privados ese servicio para poder atacar los incendios forestales”, agregó.

El contralor indicó además que “hubo un problema en el plan de mantención de esas aeronaves y eso desembocó que no estuvieran habilitadas para poder operar en ese momento”.

“Nosotros determinamos sólo faltas administrativas que le costaron al fisco más de mil millones de pesos en arriendo de naves privadas”, añadió.

Bermúdez indicó que con un plan de mantenimiento, esta situación habría sido evitada. “Si hubiese habido un plan operativo de mantenimiento de las aeronaves, si éstas hubiesen estado operativas, por cierto que no hubiesen tenido que arrendar y hubiese sido un ahorro fiscal”.