El equipo del velero que atraviesa el Atlántico para llevar a Greta Thunber a Nueva York aseguró este domingo que las emisiones de carbono ligadas a su desplazamiento serían completamente compensadas, en respuesta a la polémica en torno a las condiciones de retorno de la embarcación a Europa.

La adolescente sueca, promotora de un movimiento mundial de lucha contra el cambio climático, salió el 15 de agosto con su padre a bordo de un velero de competición, el “Malizia II”, para asistir a la cumbre mundial de la ONU en Nueva York evitando el uso de avión, medio de transporte mucho más contaminante.

Pero un portavoz del navegante alemán Boris Herrmann -uno de los patrones de la embarcación- indicó al diario berlinés TAZ que varias personas tomarían el avión a Nueva York para llevar de vuelta el barco a Europa tras la travesía de Greta, incluido él mismo.

El diario ha calculado que el trayecto en barco de Thunberg será al final más contaminante que si hubiera tomado el avión, y muchos en las redes sociales han criticado por ello a la joven activista.

“Planeamos este viaje a Nueva York en el último minuto (…) son cuatro miembros del equipo los que traerán el barco”, confirmó a la AFP Holly Cova, responsable del equipo del Malizia. “Todos los vuelos son compensados”, aunque reconoció que “esta solución es imperfecta”.

Antes de la cumbre de la ONU el 23 de septiembre, Greta Thunberg, que se ha tomado un año sabático, participará en otras muchas cumbres del clima, en Canadá, México y en Chile para otra conferencia de la ONU en diciembre.