Las acciones de Xiaomi Corp. registraron su mayor caída desde abril este lunes. El desplome se produjo tras la difusión de videos que mostraban el fatal accidente de un aparente sedán eléctrico SU7 en la ciudad de Chengdu, al suroeste de China, reportó Bloomberg. En las imágenes se observa cómo varios transeúntes intentan sin éxito abrir las puertas del vehículo, el cual terminó envuelto en llamas con al menos una persona atrapada en su interior.
La policía local emitió un comunicado sobre el siniestro. En el informe, las autoridades señalaron que el conductor, identificado como un hombre de 31 años con apellido Deng, era sospechoso de conducir bajo los efectos del alcohol. Deng falleció en el lugar del accidente.
Aunque el reporte oficial no especificó el modelo del vehículo, los informes de medios chinos y los videos en plataformas como Weibo sugieren que se trataba de un Xiaomi SU7. La compañía no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre lo ocurrido.
La manilla que divide aguas
El accidente reavivó el debate sobre un elemento específico: el diseño de las manillas de puertas en automóviles eléctricos. Estas manijas, que se retraen para mejorar la aerodinámica, haciendo que no se puedan abrir de forma convencional cuando el vehículo pierde energía, como puede suceder tras una colisión.
Este incidente se produce meses después de otra muerte que involucró a un Xiaomi SU7 en una autopista china. Aquel evento también hizo caer las acciones de la empresa y planteó preguntas urgentes sobre los sistemas de conducción inteligente y, nuevamente, la seguridad de las manijas, consignó el citado medio.
Los usuarios de la red social Weibo no tardaron en reaccionar y cuestionaron abiertamente la funcionalidad de las manillas eléctricas en los modelos de Xiaomi y otros vehículos eléctricos. Aunque estos sistemas cuentan con liberaciones manuales para emergencias, su ubicación varía según el modelo y puede resultar difícil de localizar para quienes no están familiarizados con el coche.
La polémica trasciende las fronteras chinas. En septiembre, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de EE.UU. inició una investigación por defectos en ciertas manillas del Tesla Model Y. Mientras tanto, un importante regulador chino evalúa prohibir los diseños de manijas totalmente ocultas.
Contexto global de advertencias
La investigación en Estados Unidos se anunció días después de que un reporte de Bloomberg News descubriera una serie de incidentes similares. En esos casos, personas resultaron heridas o murieron después de que no pudieron abrir las puertas cuando sus Tesla perdieron energía, particularmente tras choques.
Este contexto internacional añade una capa de complejidad al accidente del Xiaomi SU7. La seguridad de los ocupantes en situaciones de emergencia, donde cada segundo cuenta, se ve directamente comprometida por diseños que priorizan la estética o la eficiencia sobre la funcionalidad básica en una crisis.
El accidente de Chengdu expone un dilema de la industria de los vehículos eléctricos, planteó el medio especializado.
Mientras las investigaciones avanzan, el mercado reaccionó con nerviosismo. Los inversores procesan no solo el impacto reputacional para Xiaomi, sino también el riesgo regulatorio que podría imponer nuevas normas a toda una industria.
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