El expresidente panameño Ricardo Martinelli fue extraditado de Estados Unidos este lunes para que responda en su país a acusaciones de espionaje, luego de haber pasado un año en una prisión federal de Miami.

Martinelli llegó este lunes a Panamá a las 08:23 (09:23 de Chile) en un vuelo privado y pagado por el gobierno estadounidense, tras arribar al aeropuerto de Tocumen, el exmandatario fue escoltado por oficiales estadounidenses hasta ser entregado a la Cancillería del país centroamericano, consigna el periódico local La Prensa.

Martinelli abandonó Miami en un vuelo de Jet Logistics que partió del aeropuerto ejecutivo de Opa Locka. Vestido de beige y esposado de manos, el expresidente bajó del vehículo en el que fue trasladado desde la cárcel al aeropuerto y saludó alegremente a periodistas en el lugar.

“¡Estoy listo para ver el Mundial!”, dijo, haciendo un gesto con el pulgar arriba. Panamá calificó al torneo, que comenzará este jueves.

Los copartidarios de Martinelli se concentrarán frente a la Corte Suprema de Justicia de la capital panameña a las 10:00 locales (11:00 de Chile) en apoyo al expresidente de 66 años.

Martinelli era pedido por Panamá por malversar fondos para crear una red de espionaje que alcanzó a 150 personas durante su mandato (2009-2014)
, incluyendo periodistas y políticos.

La justicia panameña lo investiga también por una veintena de otros casos de corrupción. Pero bajo el tratado de extradición entre ambos países, que entró en vigor en 1905, el expresidente solamente puede ser procesado en su país por los delitos por los cuales fue pedido en extradición.