La actriz recordó las múltiples críticas que ya habían en la serie desde que hizo su primer en la ficción como Gladys.

Ya en la recta final de Verdades Ocultas, la actriz Carmen Gloria Bresky recordó sus papeles en la ficción que lleva cinco años en emisión.

En conversación con Fotech, Bresky recordó los dos papeles que realizó en las primeras temporadas: Gladys Núñez, la mejor amiga de Laura (Marcela Medel) que terminó siendo la amante de su marido, y su opuesta hermana gemela, Raquel, quien llega tiempo después de que Gladys muera al dar a luz a su bebé.

“Disfruté mucho ambos personajes, sobre todo a la Gladys, que después se murió. Y bueno, al tiempo después me contactaron para interpretar a la hermana y lo encontré súper divertido. También me gustó eso de traer a las hermanas gemelas, el cliché de las teleseries, volver a los yacimientos”, aseguró al medio.

En ese sentido, la actriz recordó también las múltiples críticas que vivía la ficción cuando formaba parte de ella. “La gente alegaba mucho, que cuándo terminaba, que aburre, que no le creo nada, que qué se fumaron los guionistas…”, mencionó.

De todas formas, había un punto que jugaba a favor de la serie. “Entiendo que el rating siempre fue bueno y por algo se mantuvo todo este tiempo en pantalla”, lanzó.

“Ahí hay un punto a favor de parte de todo el equipo para seguir haciendo que esta historia sea interesante para el público, de alguna manera creíble y, sobre todo, que se enganchen para que sigan viéndola”, aseguró Bresky.

El ahora de Verdades Ocultas

Carmen Gloria Bresky también destacó el profesionalismo de sus colegas que llevan cinco años en la ficción como Matias Oviedo, Camila Hirane, Carmen Zabala o Javiera Díaz de Valdés.

“Qué rico que mantuvieron trabajo durante todo ese tiempo (…) Camila Hirane se mandó el medio personaje. Dio la cara con todo lo que conlleva el papel e hizo lo que tenía que hacer durante todo este tiempo”, destacó.

Tras ser consultada sobre si alguna vez quiso tener una tercera aparición en la ficción, la intérprete lo descartó de inmediato.

“Si hubiese salido alguna propuesta con un argumento atractivo, ¿por qué no? Pero no lo veía como algo que pudiera suceder (…) Si me hubiesen ofrecido, había que ver de qué se trataba y no habría cerrado las puertas”, cerró.