Esta semana se vivirá un gran cambio en la teleserie Verdades Ocultas, pues su protagonista Agustina (Carmen Zabala) “regresará de la muerte” convertida en otra persona.
Según se mostrará en la historia, tras el accidente por el cual la dieron por muerta, el personaje viajó al extranjero donde se sometió a una cirugía de rostro quedando completamente irreconocible, cual culebrón mexicano.
Agustina regresará con el objetivo de recuperar a su hijo.
Su nueva cara será la de Javiera Díaz de Valdés, quien vuevle a las teleseries tras varios años alejada de la pantalla chica.
La razón del cambio es el avanzado embarazo de Zabala, quien desde el inicio de la producción había dado vida a la villana de la apuesta de la tarde.
Sin embargo, esta no es la primera vez que una producción opta por este recurso. Ya sea por un saltó en el tiempo dentro de la historia o por problemas con los actores, no han sido pocas las teleseries que han tenido que reemplazar a los intérpretes de un personaje.
Una de ellas fue Celine Reymond, quien en 2009 dejó Hijos del Monte en TVN, debido a problemas de salud que le impedían seguir trabajando. Como aún restaba más de un mes de grabación, su personaje Guadalupe “Lupe” Mardones fue ocupado por Begoña Basauri. En esta ocasión, sin embargo, no se entregaron mayores explicaciones del cambio dentro de la trama.
Algo similar pasó en Lola con Maricarmen Arrigorriaga, quien fue reemplazada por Renata Bravo en 2009, cuando la actriz no renovó contrato con el canal para el alargue de la teleserie.
Para explicar el cambio de Flora, el personaje en cuestión, se dijo que la mujer se había ido de luna de miel a Puerto Rico donde fue atacada por un grupo de tiburones y varias medusas. Producto de ello, también se sometió a una cirugía plástica.
En Rompecorazón de 1994, el personaje de Héctor Noguera fingía su muerte, se operaba y volvía transformado en otra persona interpretado por Eduardo Barril, tras quedar en bancarrota.
En lo internacional existen muchos cambios, pero uno de los más recordados es el de Hürrem en El Sultán. En 2013, la producción tuvo que enfrentar la renuncia de Meryem Uzerli, quien fue diagnosticada con “síndrome de agotamiento”, una condición que se produce debido al exceso de trabajo, demandas y presiones, la cual agota el organismo, reduciendo sus capacidades físicas y mentales.
La artista fue reemplazada por Vahide Perçin, y en la trama se explicó que Hürrem había sido secuestrada por dos años.
