La periodista Mónica Pérez dejará su puesto como rostro ancla del noticiero de TVN para emprender una aventura junto a su esposo, Francisco Sagredo, y su hija.

La razón es que la familia se irá a vivir a Londres durante un año, algo que habían anunciado en febrero pasado.

No obstante, Pérez no se desvinculará por completo del canal. Mientras viva en allá realizará corresponsalías desde Europa. Eso ha causado mucha polémica porque, según denunció públicamente el Sindicato de Prensa de la estación pública, la profesional recibiría supuestamente un sueldo muy alto por cumplir dicha labor.

Los trabajadores acusaron que, pese al delicado momento por el que atraviesa el canal, “la Dirección parece no tomar conciencia de la gravedad de la situación. Y toma medidas que pueden comprometer el proyecto de televisión pública”.

En un momento de “crisis económica que amenaza la fuente laboral de todos quienes trabajamos en la empresa”, el sindicato rechaza “de forma tajante el desarrollo de una política de rostros que no guarda relación alguna con la realidad del canal”.

Luego de que se difundiera ampliamente esta denuncia, TVN emitió un breve comunicado respondiendo a la acusación, en el cual se afirma que “las cifras que se han especulado son absolutamente falsas”.

“Ante informaciones aparecidas en prensa a causa de una declaración hecha pública por un grupo de trabajadores del canal, TVN declara que contratos como el que mantiene con Mónica Pérez son de carácter privado”, añade la declaración.

En ese sentido, recalca que “lamenta el intento de vulnerar la confidencialidad en la relación contractual con nuestra prestigiosa periodista y presentadora de noticias, quien seguirá trabajando para Televisión Nacional desde Londres”.