El presentador se destacó por su extensa carrera en televisión. En total, el animador lleva más de 60 años de carrera en la pantalla.

Mario Kreutzberger, mejor conocido como “Don Francisco”, rompió dos nuevos récords mundiales a sus 82 años al lograr coronarse como el presentador de televisión con más edad y por tener la carrera más longeva en la pantalla chica.

De acuerdo a lo informado por Guinness World Records, el chileno logró ser el animador de televisión de mayor edad con 82 años y 85 días, mientras que su carrera figura como la más extensa en los programas de variedades con 60 años y 277 días desde su primer programa.

Kreutzberger recibió su placa que lo conmemora como el destacado a nivel mundial, en donde además aseguró que “la perseverancia es la que me permitió saltar todos estos diferentes obstáculos que tuve desde el comienzo”.

“El primer obstáculo fue a la octava semana que empecé a trabajar en 1962: me echaron. Sin embargo, a la novena semana me retomaron”, recordó entonces.

En esa rama, Mario Kreutzberger destacó que “me siento muy honrado de tener tres títulos de Guinness World Records. Este es el resultado de muchos años de trabajo, dedicación y perseverancia”.

Durante el año 2012, uno de los programas históricos de Kreutzberger, Sábado Gigante, logró ganar un Récord Guinness. Entonces, se coronó como el show de variedades más longevo en la televisión mundial.

“Jamás me imaginé que iba a durar tanto, en el caso de Estados Unidos, no tenía idea de que iba a durar más de un año”, dijo entonces el animador.

De todas formas, y tras el fin del programa, en 2016, Sábado Gigante perdió su marca luego de que el espacio brasileño Programa Silvio Santos se coronara como el más extenso.

Además de Sábado Gigante, Don Francisco suma diferentes programas y se destaca como el principal rostro e impulsor de la campaña Teletón, de la cual decidió dar un paso al costado para que otros estuvieran a cargo de animar el espacio.

Kreutzberger suma otros reconocimientos y premios, como su propia Estrella en el Paseo de la Fama en Hollywood (2001), la Medalla Papal Benemerenti otorgada por el Papa Juan Pablo II (2002), el Premio Emmy (2005), entre otros.