Luego que se hiciera pública la investigación que por estos días desarrolla la PDI en la productora Fábula tras una denuncia por estafa, falsificación y uso malicioso de instrumento público mercantil, Pablo Larraín, uno de los dueños de la firma junto a su hermano Juan de Dios, se refirió por primera vez al tema.
La querella presentada en Fiscalía fue interpuesta por la propia dupla de productores en enero pasado, luego que la empresa se viera involucrada en elaboración de documentos falsos y desvíos de dinero que según el diario La Tercera ascienden a 52 millones de pesos.
De acuerdo a los hermanos Larraín, los principales sospechosos serían exmiembros del “equipo encargado de manejar los pagos de la compañía”, según lo publicado hoy por el matutino Las Últimas Noticias, donde Pablo Larraín abordó el tema.
“Se trata de una investigación abierta en torno a explicar 30 millones de pesos perdidos”, contó el director de No, quien desmintió que fueran 52 millones. “Esto que nos está pasando a nosotros es una realidad que sucede en muchas empresas chilenas y que muchas veces no se investiga. Nosotros decidimos investigar”, dijo.
“Sabemos que esto nos expone y que al final uno termina hablando públicamente de esto y no de otras cosas, pero esta es la realidad”, apuntó el cineasta. “Alguien aparentemente había falsificado firmas y cobraron cheques que no correspondían a nombre de otra gente”, agregó Larraín.
