El tercer ciclo de New Amsterdam debutó este miércoles en Star+, donde se abordará la pandemia de covid-19 y el efecto en el equipo médico.

Pese a que debutó en 2018 con opiniones divididas de parte de la crítica, New Amsterdam consiguió su reconocimiento recién tras su arribo a Netflix el año pasado.

Su tercer ciclo, sin embargo, debutó este miércoles en un streaming diferente: Star+. Allí se sigue desarrollando la historia de Max Goodwin, un médico idealista que llega a trabajar como director a un hospital público muy mal evaluado.

En este tercer ciclo, Max y su equipo médico se verán enfrentados a diferentes situaciones complejas, comenzando con el covid-19 y el efecto en los servidores de primera línea.

La producción, de hecho, fue grabada en uno de los momentos más duros de la pandemia en 2020, e intentó mostrar de forma realista lo que se vivía por esos días. Desde el pánico que sufría la población hasta la falta de insumos para el personal médico.

“Nueva York fue el epicentro de la pandemia durante la primera ola que golpeó a los Estados Unidos, y la serie trata sobre un hospital público, que debe atender a quien toque a su puerta. Por eso, sentimos que era un tema que debíamos tratar”, explicó David Schulner en un encuentro con BioBioChile y otros dos medios latinos.

Según Schulner, el equipo creador y él mismo, fueron usando sus propias experiencias para plasmarlas en los personajes. Un ejemplo claro fue que en esos días David no se sentía cómodo con otras personas tocándolo o acercándose demasiado, algo que se dejó claro en la doctora Helen Sharpe (Freema Agyeman), quien optó por aislarse del resto.

“Durante la creación de esta temporada, cada escritor aportó sus miedos, ansiedades, sus esperanzas y sueños. Espero y creo que los espectadores podrán reconocerse, verse a sí mismos, y encontrar una forma de salir de esta situación”, añadió.

“Fue casi imposible de hacer, pero es mi favorita”

Al miedo de grabar en plena pandemia, con la posibilidad de contagio real, se sumó que el equipo de producción tuvo que enfrentar otros grandes cambios.

“Solíamos grabar en hospitales reales y, por la pandemia, tuvimos que construir hospitales en sets”, recordó.

“Grabar en las calles de Nueva York también fue muy difícil, debido a que los restaurantes pusieron sus mesas al aire libre. Asimismo, los actores no podían usar uniformes de policía, para no causar confusión”, dijo.

“La temporada tres fue casi imposible de hacer, pero es mi favorita”, reconoció finalmente.

Actualmente la producción está emitiendo su cuarto ciclo en Estados Unidos, el que aún no tiene fecha de estreno en Chile.