El actor aseguró que se tomó casi todas sus entrevistas del 2021 como si estuviera jugando popular juego de Estados Unidos. "Fue increíblemente divertido", dijo.

Pese a que la expectativa era muy alta, muchos fanáticos de Spider-Man estaban con dudas sobre cómo sería la entrega de No Way Home entre las negativas de los actores y las filtraciones.

Y es que quien más llamó a no tener esperanzas de un encuentro entre diferentes versiones de Peter Parker fue el actor Andrew Garfield, quien en ese mismo periodo se encontraba promocionando sus cintas tick, tick… BOOM! y The Eyes of Tammy Faye.

Tanto negó su aparición en la película que incluso acusó a las imágenes en las que se veía con Tobey Maguire y Tom Holland como una vil edición de Photoshop y, por supuesto, al momento de estrenarse la película muchos le cobraron la palabra.

De hecho, en redes sociales se pueden encontrar múltiples recopilaciones del intérprete negando su participación en No Way Home, así como gente que pide que se le entregue el Oscar a mejor actor por su insistencia.

“Cada día me aseguro de ver la entrevista de Andrew Garfield en el show de Jimmy Fallon negando que está en Spider-Man No Way Home y me rompo las costillas siempre que él dice ‘estoy tratando de controlar las expectativas’. Amor, eso estuvo al nivel del Oscar”, bromean en redes sociales.

La mentira como un juego

Ahora, en una entrevista con The Wrap Garfield relató cómo fue mentir en la previa de la cinta, asegurando que fue “extrañamente agradable”.

“Fue estresante, no voy a mentir. Pero también extrañamente agradable”, mencionó.

De acuerdo al intérprete, vio todo ese momento de mentiras como si participara del juego Werewolf, un juego popular en Estados Unidos. Este se trata de que un grupo de personas se dividen a través de cartas entre aldeanos y hombres lobos, con estos últimos que deben ocultar a toda costa su identidad.

“Hubo momentos en los que decía: ‘Dios, odio mentir’. No me gusta mentir y no soy bueno mintiendo, pero seguí enmarcándolo como un juego”, explicó.

“Me coloqué en la posición del fanático: ¿qué querría saber? ¿Me gustaría que jugaran conmigo? ¿Me gustaría que me mintieran? ¿Me gustaría que me mantuvieran alerta adivinando? ¿Querría descubrirlo cuando fuera al cine?”, añadió.

Ante ello, el actor tuvo su respuesta clara. “Como cualquiera que haya jugado Werewolf, cuando eres el hombre lobo tu corazón se hunde porque sabes que tienes un momento estresante por delante”, comentó.

“Tienes que mentirle en la cara a tus amigos y tratar de convencerlos de que no eres el malo del juego, pero fue emocionante, en realidad”, agregó.

Las filtraciones

Sin embargo, cuando las imágenes del set de grabación se propagaron, el actor ya estaba sumido en el juego. “Trabajé muy duro para mantener en secreto de que estaba filmando en Atlanta”, recordó.

“Estaban ocurriendo todas estas filtraciones, y yo decía: ‘Oh, Dios mío, muchachos, ¿qué diablos está pasando? ¡Estoy trabajando tan duro para guardar el secreto y luego aparece una imagen mía con Tobey!’, a lo que me dicen: ‘No, no, vamos a mantenerlo en secreto’, así que seguí negándolo”, narró.

“Fue una experiencia rara esto de jugar Werewolf con todos los fanáticos de Spider-Man en el mundo, pero fue increíblemente divertido”, cerró.