La actriz Elizabeth Olsen está en uno de los momentos más populares de su carrera gracias al éxito de la serie de Disney+ Wandavision, sin embargo, algunos usuarios de internet quieren que sea cancelada, acusándola de racista.

Recientemente la actriz habló sobre su personaje del Universo Cinematográfico de Marvel, la Bruja Escarlata, en el podcast Sill Watching de la revista Vanity Fair. En la conversación la actriz describió los accesorios que tiene el vestuario de la versión original de los cómics de su personaje como “gitano”, término considerado despectivo hacia los romaní, según recogió We Got This Covered.

“Tenemos un episodio de Halloween y estaban tratando de averiguar qué tan grande era el guiño al personaje que íbamos a hacer y comenzó con el clásico disfraz de Bruja Escarlata. Era como una cosa gitana que tiene que usar una diadema yo abogué por ello. Yo estaba como ‘No, tenemos que ir de lleno’. Esto es lo mejor, si Paul lo está haciendo, yo también”, comentó, aludiendo a que Bettany, actor que interpreta a Vision, igualmente colaboró para utilizar el traje de los cómics en la serie.

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Sumado a lo anterior, Olsen había tenido otros problemas asociados a utilizar esa palabra al hablar de su personaje de Marvel. En 2015 el presentador Graham Norton le comentó que no debía utilizar dicho término para describir las características de Scarlet Witch.

A raíz del hecho, usuarios de redes sociales la tacharon de “racista”, destacando que ya conocía la connotación negativa del término. Otras personas criticaron que “haya repetido su error” y aseguran que “debe disculparse”.

Lo anterior se suma a que la actriz no usa redes sociales desde el año pasado, luego de que fuera acosada por fanáticos para reclamarle que no escribió nada relacionado a la muerte de Chadwick Boseman, quien fue intérprete del también superhéroe Pantera Negra, según informó Comicbook.

En la ocasión, varios actores que tienen papeles en las cintas de Los Vengadores utilizaron sus espacios en internet para despedir al actor, pero no fue el caso de Olsen, quien recibió la molestia de algunos fanáticos.