Algunos parlamentarios se manifestaron disponibles a discutir el aumento de la cotización adicional al que se abrió el presidente Sebastián Piñera en la reforma de pensiones, pasando de un 4% a un 8% extra y totalizar un 18%.

Esto, insisten en el Gobierno, de forma gradual. Un mensaje que se da a inicios de marzo, que es el mes en donde el Ejecutivo pretende que se vote en general la propuesta que está en la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja.

El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, señaló que la idea es minimizar los efectos en el mercado laboral.

Desde el empresariado, el presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Bernardo Larraín Matte, señaló que el aumento en la cotización va en el camino de países de la OCDE, pero que no es el único debate que hay que dar.

Desde la oposición señalaron que es correcto apuntar a una cotización mayor para mejorar las pensiones.

Sin embargo, el diputado de la Democracia Cristiana, Raúl Soto, señaló que de aumentar un 4%, un 5% o un 8% el aporte, éste debería ir a un nuevo pilar con una lógica solidaria.

El diputado de la UDI, Guillermo Ramírez, manifestó disponibilidad para avanzar en la idea del Ejecutivo.

La propuesta actual, de 4% de cotización extra con cargo al empleador, apunta a una gradualidad de ocho años. Una reforma que, en régimen, según el Gobierno, afectaría a 52 mil empleos.