Un nuevo estudio identificó un fósil craneal de un wombat gigante, poco estudiado, que habitó Australia hace 80.000 años.

Un nuevo estudio publicado en la revista Papers in Palaeontology, comprobó que unos restos fósiles encontrados en el año 2000 en Australia, pertenecieron a un wombat gigante. Se trata de una especie extinta poco conocida y estudiada, que tomó décadas identificar.

Los restos en cuestión corresponden a un cráneo, que fue descubierto exactamente en la cueva Lower Johansons, en Rockhampton. Tras varios años de excavaciones se identificó su especie, que había sido previamente descrita pero poco estudiada.

Según teorizan ahora los expertos, este tipo de wombat vivió en Australia hace 80.000, mucho antes de que los humanos poblaran estas zonas del país.

Este fósil fue bautizado como Ramsayia magna, y se estima llegó a pesar 70 kilos, además, es considerado una especie rara, por los pocos hallazgos sobre ella. Así mismo, desplaza a los fósiles “diprotodontidos”, que anteriormente se denominaron wombats gigantes.

El wombat gigante menos conocido

“Ramsayia es actualmente la especie de wombat menos conocida, ya que se ha descrito a partir de fragmentos mandibulares y craneales”, dice el paper.

Por esta razón además, los descubrimientos sobre esta antigua especie avanzan lento. Por ahora los científicos señalan en la investigación que es imposible identificar cómo y por qué se extinguió.

Cabe destacar que en la Tierra aún sobreviven especies pequeñas de wombats (Vombatidae, en su nombre científico). En la actualidad se caracterizan en el grupo de los marsupiales, nativos de Australia, cuadrúpedos y de patas cortas.

Representación de wombat gigante
Representación de wombat gigante para el estudio de la revista “Papers in Palaeontology”

Los wombats ahora, bastante más pequeños, llegan a pesar entre 20 y 30 kilos y viven en extensos sistemas de madrigueras de zonas boscosas y montañosas del sur y este del país.

Al momento, estos marsupiales se encuentran en peligro de extinción y se calculan solo quedan unos 100.000 en Australia.