El terremoto de 8,4 grados en Illapel en 2015 podría explicar los procesos eruptivos registrados en los volcanes Nevados de Chillán, Copahue y Villarrica, según determinó un equipo de geólogos de la Universidad Católica de Temuco.

El descubrimiento no se quedaría ahí, ya que los científicos también dicen haber detectado cambios en el comportamiento de los macizos previo al terremoto.

Según la investigación de Cristián Farías y Daniel Basualto -este último también integrante del Observatorio Vulcanológico Andes del Sur de Sernageomin-, tras el terremoto mencionado se detectaron abruptos incrementos de sismicidad, aumento de dióxido de azufre, desplazamientos observados con GPS y cambios de frecuencias sísmicas, entre otros, en los tres volcanes señalados.

Asimismo, los tres habían registrado un cambio en su actividad base semanas o meses antes del evento sísmico.

La investigación fue presentada en Congreso Geológico que se realiza en la Universidad de Concepción, que congrega a más de 1.200 investigadores y estudiantes de esta área, y que contará este jueves con dos conferencias magistrales para el público general en el Foro del campus.