Fue en mayo pasado cuando SpaceX lanzó un cohete con los primeros 60 satélites de su proyecto Starlink, el cual busca proveer internet desde el espacio.

En la segunda fase del procedimiento, el cohete comenzó a liberar los satélites una hora después del lanzamiento, a una altitud de 440 kilómetros, luego de despegar de Cabo Cañaveral, Florida.

Pero para que Starlink comience a funcionar se deben activar 800 satélites, lo que requerirá una docena de lanzamientos más. Hasta ahora la firma fundada por Elon Musk ha puesto un total de 120 satélites en órbita, aunque el magnate espera crear una red con 12 mil a poca distancia del planeta.

Sin embargo, a pesar de las intenciones de Musk y SpaceX, lo cierto es que hay expertos que han criticado el lanzamiento de estos satélites debido a la contaminación lumínica que generan.

Un ejemplo es la astrónoma Clarae Martínez-Vázquez del Observatorio Cerro Tololo (CTIO) y parte del equipo DECam, quien en sus redes sociales compartió una imagen en la que se muestra cómo estos satélites dificultan la observación del espacio.

“¡Wow! ¡Estoy en shock! La gran cantidad de satélites Starlink que cruzan nuestros cielos esta noche en el Cerro Tololo”, comenzó señalando.

En el tuit, Martínez-Vázquez agregó que la exposición del instrumento DECam del centro de investigación se vio severamente afectado por 19 de ellos.

“¡¡El rastro de los satélites Starlink duró más de cinco minutos!! Bastante deprimente… Esto no es cool”, puntualizó.

En tanto, el astrónomo norteamericano Cliff Johnson también se refirió a los efectos que el proyecto Starlink tiene en la observación espacial.

En sus redes sociales, Johnson compartió una fotografía obtenida gracias a la DECam en la que se aprecian los satélites de Musk.

Cabe señalar que ante la inquietud expresada hace un tiempo por los astrónomos, SpaceX dijo que los próximos satélites tendrán su base pintada de negro para evitar que arruinen las observaciones con telescopios desde la Tierra.

Además precisaron que de ser necesario, ajustarán las órbitas de sus satélites y así no perjudicar el trabajo de los astrónomos.