El dueño y creador de la empresa Sonda, Andrés Navarro, también conocido por su cercanía con el ex presidente Sebastián Piñera y con las campañas políticas de la DC, actualmente es candidato para presidir la Sociedad de Fomento Fabril.

En entrevista con Radio Duna, Navarro se refirió a la relación de las empresas con la política, una relación que, si bien no es nueva, ha sufrido cambios a los cuales los hombres de negocio deben adaptarse, como es el caso de la transparencia y la interacción con las personas.

“Aquí han habido cambios a los cuales los empresarios, esta vez, no nos hemos adaptado lo suficientemente rápido. El primero tiene que ver con la transparencia y la relación de la empresa con la política. Esto no es algo nuevo en Chile, pero lo que es nuevo, es que hay una sociedad que lo evalúa y lo investiga de forma distinta, y los empresarios tienen que tomar en cuenta eso y cambiar hábitos antiguos”, indicó.

En esta línea, el creador de Sonda afirmó que si se investigara más a fondo, se podría ver que la relación de la política y la empresa es más amplia de lo que parece. De hecho utilizó su propio ejemplo, recordando su participación en el plebiscito de 1988 y en las campañas los años noventa.

“Desde el año 1990, hasta 1997, efectivamente hice aportes a campañas políticas (…) canalizaba esos aportes a través de empresas mías, no de otras donde tuviera socios, hasta que ocurrió lo del año 97 en que se hizo evidente algo que era conocido, que yo había participado en la campaña presidencial de Ricardo Lagos (…) esto causó bastante revuelo, yo desde ahí suspendí mi participación en el financiamiento de campañas, y no participé en la de Sebastián Piñera”, afirmó.

Tras ser consultado, Navarro explicó que son los políticos los que acuden a los empresarios, y no al revés, y dejó en claro que no es fácil participar en los financiamientos de campañas.

“De todos los políticos que conozco, que son diputados y senadores, no conozco a ninguno que no haya ido a ver a un empresario amigo para pedirle dinero para su campaña (…) Es un cacho esta cuestión de poner lucas a los políticos, a no ser que tengas una intencionalidad específica y quieras conseguir un favor, pero en general es un cacho”, señaló.

Andrés Navarro explicó que él no entregaba dinero, pero si financiaba pagando imprentas o confección de propaganda para los políticos de su confianza y línea ideológica a través de empresas de publicidad.

Asimismo dejó en claro que, según su postura, el aporte a las campañas pasa por un tema de responsabilidad de quien entrega el dinero, y confidenció que en su caso, nunca financió para pedir favores, pero si cometió irregularidades tributarias que ya están prescritas.

Las facturas hechas por publicidad “las tiré a gasto (…) es una irregularidad, pero afortunadamente están todas prescritas”, dijo, explicando que fueron realizadas en una época incipiente del financiamiento público, en que de hecho, no se pagaba dinero por los votos obtenidos.