La sanitaria Essbio reconoció que en Coronel existe un problema de turbiedad del agua potable ocasionada por sedimentos en antiguas tuberías de fierro, pero descartó categóricamente que esto sea un riesgo para la salud de las personas.

La Autoridad Sanitaria ha rechazado cualquier vínculo entre los 80 casos de hepatitis que se contabilizan en Coronel y la calidad del agua, que en varios sectores presenta turbiedad en algunas horas del día.

El alcalde Leonidas Romero ha recibido todas las confirmaciones de los análisis que se realizan en base a la normativa existente y otros monitoreos adicionales que se llevan a cabo.

Romero cree que la reunión de este viernes con la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, la Superintendencia de Servicios Sanitarios, la Autoridad Sanitaria y Essbío, debe poner punto final a las sospechas.

Claudio Santelices, gerente de clientes de Essbio, también descartó cualquier vinculación entre los casos de hepatitis y el servicio de agua potable que provee la empresa.

Sostuvo que desde comienzos de año se realiza un intenso plan de lavado de todas las tuberías en los sectores que presentan eventos de turbiedad, pero hay una parte de los 300 kilómetros de red que debe ser reemplazada.

Hace un mes y medio Essbío inició la renovación de estos 12 kilómetros, que se espera culminar en octubre de 2015, lo cual debería mejorar notablemente la apariencia del agua potable que se consume en dicha comuna.