Con otra gran actuación de sus astros LeBron James, Chris Bosh y Dwyane Wade, el Miami Heat venció este viernes por paliza de 117-92 a Indiana Pacers, para clasificarse por cuarto año consecutivo a la final por el campeonato de la NBA.

El Heat se llevó su cuarto título al hilo de la Conferencia Este al ganar cuatro a dos la serie al mejor de siete juegos contra los Pacers, y ahora espera por el desenlace del duelo del Oeste entre San Antonio Spurs y Oklahoma City Thunder.

Miami estará buscando su tercer título consecutivo desde el próximo jueves, cuando se inicie la final por el campeonato en otra serie al mejor de siete juegos.

Una vez más, LeBron James llevó la voz cantante al cosechar 25 puntos y 6 asistencias, mientras Bosh aportó otros 25 cartones y ocho rebotes y ‘Flash’ Wade colaboró con 13 unidades, misma cantidad que el alero Rashard Lewis.

“Me siento bendecido, muy bendecido de jugar con el Heat”, dijo James en la cancha, mientras alzaba el trofeo de campeón de Conferencia. “Esta es una gran franquicia, un grupo increíble, pero no tomamos nada a la ligera porque aún tenemos trabajo por hacer, vamos a prepararnos para la final.

Por primera vez en 27 años un equipo de la NBA avanza a finales por cuarto año seguido, hazaña que sólo habían conseguido antes los Boston Celtics (1984-87) y Los Angeles Lakers (1982-85).

Picado por comentarios adversos y necedades de algunos jugadores de Indiana, como Lance Stephenson, que le sopló en el oído a LeBron para burlarse de la derrota del Heat en el quinto partido, Miami puso el pie en el acelerador desde el pitazo de arranque y no lo quitó hasta el segundo final.

Incluso, pese a llevar 33 puntos de ventaja (91-58) al cierre del tercer cuarto, el técnico Erik Spoelstra mantuvo en la cancha a sus tres estrellas hasta bien entrado el parcial, para hacer más aplastante la derrota.

“Fue uno de esos juegos que queremos jugar de principio a fin. Aquí en nuestra cancha, queríamos hacer una declaración de principios”, apuntó Bosh.

Stephenson fue un incordio en toda la serie, y destacó más por sus payasadas en la cancha y sus declaraciones fuera de tono, que por el baloncesto que le aportó a unos Pacers que se vieron inmaduros para llegar a un nivel más alto.

“Es una amarga decepción no alcanzar nuestros objetivos”, dijo el entrenador de los Pacers, Frank Vogel, quien comparó a LeBron James con Michael Jordan y al Miami Heat con los Chicago Bulls, que ganaron seis títulos de la NBA.

“Es una amarga decepción perder contra este equipo tres años en fila. Pero estamos compitiendo contra el Michael Jordan de nuestra era, los Chicago Bulls de nuestra era, y hay que quitarse el sombrero ante ellos por la forma en que jugaron toda la serie”, reconoció Vogel.

Ahora los de Miami Heat se aprestan a enfrenatar a viejos conocidos, pues ya doblegaron en la final de 2012 a Oklahoma City y en la de 2013 a San Antonio.

“A este grupo le encanta competir y le encanta competir al más alto nivel, y ser empujado a un nuevo nivel”, puntualizó Spoelstra.