El ingeniero constructor Fernando Barrientos, quien fuera por más de 30 años jefe de la Unidad Técnica del Serviu Osorno, aseguró que el puente Bulnes “tendría todas las condiciones para continuar con su vida útil”.

El profesional, tras efectuar un completo y detallado análisis de la construcción, refutó el estudio mencionado por el MOP, confeccionado por una consultora, en la que se detallan fallas en el viaducto, las que servirían como argumento para la destrucción y posterior reposición del puente.

A juicio de Barrientos, estas anomalías se podrían mejorar sin necesidad de echar abajo la infraestructura.

Por otra parte, Barrientos señaló que el estudio aludido por Obras Públicas menciona fallas en el puente, como por ejemplo un pequeño descenso en los tramos uno y dos, surgido tras el terremoto de 1960.

Añadió que, a pesar que por cerca de 50 años el puente ha sido usado para todo tipo de vehículos, esta situación no reviste peligro y es muy fácil de reparar, debido a que se encuentra en la superficie, reiterando que no es necesaria su demolición sino sólo su reparación.

Además, el ingeniero se refirió a las fisuras existentes en las vigas del puente Bulnes, tal como lo asegura el análisis expuesto por la seremi de Obras Públicas.

Advirtió Barrientos que, en caso que hubiese un nuevo terremoto similar al del año 1960, no habría peligro en la estabilidad del puente Bulnes, calificando de “criminal” la acción que se pretende realizar con la estructura.

Para concluir, el profesional hizo ver el peligro al que se expone a la comunidad osornina con el posible derrumbe del puente Bulnes, puesto que debido a su gran compactación y calidad en su construcción, la única forma de echarlo abajo, aseguró, sería con explosivos.

No obstante, insistió en lo innecesario de su destrucción, por lo que hizo un llamado a las autoridades a reconsiderar la medida de demolición y la construcción del viaducto Portales.